Federico Gastón Fernández, el brazo ejecutor de la gloria albiceleste

  • El balonmano argentino masculino alcanzó la gloria en los Panamericanos de Guadalajara y lo hizo con el joven extremo izquierdo Federico Gastón Fernández, jugador del Ciudad Encantada de la Liga ASOBAL española, como brazo ejecutor.

Antonio Martín Guirado

Guadalajara (México), 25 oct.- El balonmano argentino masculino alcanzó la gloria en los Panamericanos de Guadalajara y lo hizo con el joven extremo izquierdo Federico Gastón Fernández, jugador del Ciudad Encantada de la Liga ASOBAL española, como brazo ejecutor.

La selección "albiceleste" escribió este lunes una página de oro en su historia al lograr por primera vez el título en los Panamericanos. Y lo hizo ante su mayor rival, Brasil, el conjunto que le había derrotado en las finales de los dos últimos torneos.

"Venimos trabajando durante años para ganar esta medalla y ahora, afortunadamente, todo se nos dio de cara", dijo el jugador de 22 años, máximo artillero del encuentro (26-23), con seis tantos de siete intentos.

Su único fallo llegó en un lanzamiento de siete metros.

El premio fue doble: además de la presea dorada Argentina selló el pase directo a los Juegos Olímpicos de Londres 2012.

"Durante 15 minutos del primer tiempo estuvimos un poco desconcentrados y nos sacaron cinco goles", recordó Fernández sobre el momento en el que los brasileños se pusieron por delante en la primera mitad por 7-12.

"Pero después -añadió- tuvimos la cabeza 100 por cien en el partido los últimos 45 minutos y eso nos sirvió para ganar".

No resultó una sorpresa que el argentino fuera el máximo anotador de la final. Ya en la ajustadísima semifinal frente a Chile (26-25) volvió a ser el mejor jugador con ocho goles de 11 intentos, incluidos cinco desde los siete metros.

Pero, lejos de querer reclamar el protagonismo, el jugador dijo que la clave de la victoria final estuvo bajo los palos. Se refería a su compañero, el cancerbero Matías Schulz, que logró atajar 22 de los 45 tiros que Brasil efectuó.

"La ayuda de Matías en el arco evitó muchos tiros de Brasil. Lo que fue el tema a celebrar", manifestó.

Humilde, trabajador y con un futuro desbordante por delante, según sostienen los periodistas especializados de Argentina que han seguido el evento.

El oro con la selección absoluta era cuestión de tiempo. Fernández ya avisó de sus intenciones con la plata en los Juegos Odesur (Sudamericanos) de Medellín, en 2010, donde cayó ante Brasil.

Cinco años antes había logrado el oro en el Campeonato Panamericano de Balonmano, realizado en Brasil, y se había coronado campeón en las categorías cadetes.

Una vida dedicada al balonmano desde que comenzara a realizar sus primeros tiros con seis años en el Instituto Nacional de Educación Física, de San Fernando (Argentina).

Ahora, con su 1,88 de altura y sus 88 kilos, su imponente presencia se antoja fundamental para el futuro inmediato de Argentina. Londres 2012 espera. Y las intenciones de la selección están claras, como ya avisó el entrenador Eduardo Gallardo tras el triunfo panamericano en Guadalajara.

"No vamos a ir de paseo", aseguró.

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