Fiesta española en Brasil por el primer título mundial

Río de Janeiro.- Centenares de españoles celebraron hoy con algarabía en Río de Janeiro el primer título de su país en un Mundial de fútbol acompañados por miles de brasileños y gente de otras nacionalidades que se les unieron para ver la final con Holanda.

Los aficionados españoles, reunidos en la playa de Copacabana y en la Casa de España, sufrieron durante más de cien minutos del tiempo reglamentario y la prórroga, hasta que Andrés Iniesta, jugador del Barcelona, marcó en el minuto 116 para entregar a los españoles el título de Campeones del Mundo y dar rienda suelta a la fiesta.

Banderas españolas, holandesas, camisetas rojas y naranja, pero también numerosas banderas brasileñas y camisetas de la Canarinha se mezclaron entre la multitud en la playa de Copacabana, mientras que la Casa de España era tomada por una auténtica marea roja de inmigrantes, expatriados y sus familias.

Después de que Brasil fuera eliminado en cuartos de final por la selección holandesa, la mayoría de brasileños que acudieron al FIFA Fan Fest en Río de Janeiro mostraban su apoyo a España.

"Me gusta España, se parecen más a nosotros en espíritu que los holandeses", afirmó Pera, una brasileña que fue a ver el partido con su compañera de piso española.

"Haber ganado estando en Brasil, el país del fútbol, en un año en que la Canarinha quería ganar el sexto título es increíble", exclamó la española Carmen Morales, que se sumó a los gritos de "campeones, campeones, oe, oe, oeee" de los españoles que celebraban el título.

Mientras tanto en la Casa de España, en el barrio carioca de Humaitá, el gol de Iniesta que acabó con la angustia de millones de españoles fue celebrado con pitos, banderas, vivas a España y lágrimas de emoción, principalmente de los hombres y los mayores.

Después del pitido final los cerca de quinientos presentes en la Casa de España se fundieron en abrazos colectivos y comenzaron una fiesta con canciones tradicionales españolas y ritmos latinoamericanos y caribeños.

Esta mañana, el Cristo Redentor del cerro del Corcovado, uno de los símbolos de Río de Janeiro, apareció con una bandera gigante de Brasil a sus pies para dar el pistoletazo de salida a la Copa del Mundo de 2014 para la que el gigante suramericano toma el relevo de Sudáfrica.

Según fuentes de la organización del FIFA Fan Fest, más de 17.000 personas vieron hoy el juego en ese recinto, que durante todo el Mundial ha recibido la visita de más de 600.000 aficionados de todos los países.