Froome mira de reojo a Contador

Leeds (Reino Unido), 4 jul.- "Estoy lejos de ser invencible", dice Chris Froome, quien desde mañana defenderá su titulo en el Tour de Francia, pero el británico de origen keniano sí admite su condición de favorito, si bien observa de reojo al español Alberto Contador, su rival y enemigo número uno.

Froome, de 29 años, nacido en Kenia y criado en Sudáfrica, echará a andar con la mosca tras la oreja. No llega, admite, como en 2013, por culpa de las lesiones y alguna caída, pero sobre todo por una escena que se produjo en el último Dauphiné que le puso en alerta. Sus ataques a Contador no sirvieron para nada, y luego el español le remató en la última etapa.

"Es evidente que siento presión porque soy el defensor del título y por empezar la carrera en nuestro país", asegura Froome, pero "ambos también serán factores que se van a convertir en energía positiva para dar el máximo e intentar vencer de nuevo en París".

El Froome imperial de 2013 no es el de este año. "He tenido problemas todo el año: una lesión en la espalda, una infección de pecho, una caída en el Dauphiné", pero estos imprevistos tampoco le alejan al líder del Sky de su mejor forma.

Sobre Contador sabe que "llega más fuerte que el año pasado y será el rival número uno", y que en la montaña podría tener problemas si el madrileño confirma la forma del Dauphiné, la que le acercó a su mejor nivel.

Por su parte, Alberto Contador no quiere cargar con el cartel de favorito.

"Hay un corredor que ha demostrado ser el más fuerte en los dos últimos años con diferencia. Froome es el favorito número uno. Yo estoy mejor que el año pasado, pero no sé si será suficiente para batir a Froome. Me incluyo entre los candidatos a la victoria", dijo el "nuevo" Alberto Contador en una repleta sala de prensa.

Un campeón en funciones de aspirante. El español ha superado en resultados a Froome en la presente temporada. Las victorias en Tirreno-Adriatico y en la Vuelta al País Vasco son sus credenciales, además de un estado de forma espectacular en el Dauphiné, donde fue segundo tras Andrew Talansky.

Sobre el lance en la montaña del Daauphiné, Contador admite que salió reforzado en su duelo particular con Froome.

" Era un buen test y quise probar mis piernas ante sus ataques. Hizo un ataque durísimo y responder fue algo bueno para mi", dijo.

La lucha por la corona del Tour. Froome, menos popular en el Reino Unido que Sir Bradley Wiggins e incluso que Cavendish, tiene el reto de seguir la racha que inauguró su compañero ausente en 2012, mientras que Contador persigue un reinado que disfrutó en 2007 y 2009. Sería el regreso a la cima.