Gran ambiente en el primer derbi madrileño de 2015

Miguel Ángel Moreno

Madrid, 7 ene.- El primer derbi madrileño del año 2015 entre Atlético de Madrid y Real Madrid presentó un gran ambiente en el estadio Vicente Calderón, con los hinchas del disuelto Frente Atlético animando junto a todo el estadio, que vio una victoria local por 2-0, con goles de Raúl García, de penalti, y el uruguayo José María Giménez.

El Calderón, que había vivido jornadas extrañas durante los últimos partidos tras la muerte de un aficionado ultra del Deportivo de La Coruña en los alrededores del estadio por una reyerta entre hinchas radicales el pasado 30 de noviembre antes de un Atlético-Deportivo, disfrutó de un derbi de Copa del Rey con máxima expectación y un ambiente como en las grandes ocasiones.

Con el regreso del ídolo rojiblanco Fernando Torres -como titular y en un derbi contra el Real Madrid- entre los alicientes, los aficionados rojiblancos respondieron a su equipo coreando los cantos habituales, apoyando a su entrenador Diego Simeone y sin cantos ofensivos ni racistas.

El éxtasis rojiblanco se vivió en torno al minuto 60, cuando al gol de penalti de Raúl García se sumó la sustitución de Torres, despedido con bufandas al viento por los aficionados rojiblancos.

La actuación del Frente Atlético, disuelto como peña por el Atlético a primeros de diciembre tras la reyerta el 30 de noviembre que provocó la muerte a un aficionado ultra del Deportivo de La Coruña y en 'huelga' de animación por esa decisión del club, era una de las incógnitas del partido, ya que el grupo radical disuelto había prometido en redes sociales volver a animar en el derbi.

Los hinchas ubicados en la Grada Joven del Calderón, lugar donde se coloca la peña ahora disuelta por el club, tuvieron que pasar a la entrada por cuatro filas de agentes de seguridad para acceder a las puertas y estuvieron supervisados por agentes de la Policía Nacional junto a los tornos de acceso.

Dentro del campo, permanecieron de pie sin pancartas coreando a los jugadores rojiblancos, entre ellos especialmente a Fernando Torres, en su retorno como jugador rojiblanco y en el once titular del argentino Diego Simeone. También pitaron a la salida del once del Real Madrid para el calentamiento y durante los momentos de dominio del juego del equipo de Carlo Ancelotti.

Acudieron también al estadio del Manzanares unos cien aficionados del Real Madrid, que fueron ubicados en uno de los bordes del anfiteatro del Fondo Norte y corearon a sus futbolistas cuando mostraron dominio, aunque se fueron apagando cuando se confirmaba la derrota.

En los prolegómenos del partido, el Atlético creó también expectación proyectando en los videomarcadores un resumen en vídeo de la presentación de Torres del pasado domingo 4, con impresiones del futbolista durante el acontecimiento, al que acudieron más de 40.000 personas.

El nombre del 'Niño' Fernando Torres fue uno de los más coreados durante el anuncio de las alineaciones, superando al de su entrenador Diego Simeone.

Durante el partido, los hinchas de la zona del Fondo Sur llevaron la voz cantante como acostumbraban a hacerlo, apoyando a su equipo. Tan solo en el minuto 45, cuando se aproximaba el descanso, se escuchó un "Se nota, se siente, el Frente está presente". Algunos pitos y algunos aplausos respondieron al cántico, mostrando una cierta división de opiniones de la hinchada.

El minuto 58 fue el momento de la catarsis rojiblanca, con el gol de penalti de Raúl García que suponía el 1-0, al que siguió la sustitución de Fernando Torres, que fue despedido con las banderas al viento cuando salió del campo para dar entrada a 'Koke' Resurrección.

A partir de entonces, y más con el gol de cabeza del charrúa Giménez en el minuto 75, el partido fue una fiesta para la grada rojiblanca, que apoyó a su equipo y disfrutó de la victoria contra el eterno rival.

El derbi, el primero de este año 2015, contó con un importante despliegue de seguridad correspondiente a la declaración de alto riesgo por parte de la Delegación del Gobierno en Madrid.

Este operativo constó de unos 800 efectivos, entre policías, vigilantes de seguridad privada y miembros de los servicios de emergencia.

De los 800 efectivos, unos 300 fueron miembros de la Unidad de Intervención Policial (antidisturbios), de la Unidad de Prevención y Reacción (UPR), Guías Caninos y Caballería de la Policía Nacional.