Iniesta, Isco, Adama-Cristian, Vela, Raúl García y Reyes

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Roberto Morales

Madrid, 24 nov.-

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-- ANDRÉS INIESTA.

El Barcelona necesita referentes en un momento de lesiones, víctima del 'virus FIFA' y sin su líder, Lionel Messi, cuando Andrés Iniesta dio un paso al frente ante el Granada para salir de una de sus temporadas más irregulares. Afectado, como otros internacionales españoles, de la disputa de la Copa Confederaciones, tuvo más banquillo que nunca desde la llegada del 'Tata' Martino.

Pero Iniesta es un futbolista superlativo. De él nace el mejor fútbol y ante la ausencia de Xavi Hernández se echó al Barça a sus espaldas. Neymar debía hacer de Messi pero no brilló. Ya estaba Iniesta para lanzar el fútbol y marcar su primer tanto de una temporada que debe ir a más para estar en su mejor momento físico en los meses en los que los títulos se deciden.

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-- ISCO ALARCÓN.

La entrada en el Real Madrid de Gareth Bale provocó un cambio de sistema que dejó un gran damnificado en el camino. Isco, que había brillado sin sentir el peso del escudo en su salto a un grande, de golpe desapareció. Se esgrimió un bajón físico pero la realidad era que con el 4-3-3, no había hueco para un futbolista de su estilo. Alejado de la media punta donde se siente cómodo, su protagonismo se redujo.

La grave lesión de Sami Khedira cambia el panorama. Así es el fútbol. Todo cambia en unas horas. Ancelotti pasa a un 4-2-3-1 como única solución para juntar a Illarramendi y Xabi Alonso, recupera la figura de media punta e Isco responde en el campo. Fue titular en Almería. Asistió y marcó. Siempre con detalles de magia y consciente de que para convertirse en fijo su sacrificio defensivo debe ser mayor al de otros que tienen carta libre para solo atacar.

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-- ADAMA TRAORÉ/CRISTIAN HERRERA

En una Liga de tanta diferencia entre los candidatos al título y el resto, los aficionados agradecen guiños a la cantera. Y de golpe aparecen chavales que muestran su descaro en el estreno. Lo hizo Adama Traoré en el Camp Nou. Un juvenil que no cuenta para Eusebio Sacristán en el filial pero sí llama la atención del 'Tata' Martino. Nacido en La Maternitat, a pocos metros del Camp Nou, y de padres malienses humildes, Adama muestra la posibilidad que da el fútbol de cambiar vidas.

Su padre trabajador de un taller y su madre empleada del hogar. Se emocionaron al ver jugar a su hijo, con 17 años rodeado de estrellas, y el descaro pese a jugar en la banda izquierda (habitualmente juega por la derecha), al encarar a rivales, marcharse y hasta rozar el gol. Esa sensación la saboreó Cristian Herrera con el Elche. Su debut será inolvidable. Procedente de la cantera de Las Palmas, donde desechó renovar tras ser máximo artillero del filial, fichó por el Elche y ha marcado doce tantos en trece jornadas en Segunda B. Escribá le dio la oportunidad ante todo un Valencia. Su primer balón: control orientado y zurdazo ajustado al poste que rozó el gol. Poco después su nuevo disparo con la izquierda dio el triunfo a su equipo y le empuja hacia los focos a un nuevo goleador de la Liga BBVA.

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-- CARLOS VELA.

Fue la noche de su vida. Nunca en su carrera había marcado cuatro tantos en un partido. Nunca en el fútbol español un futbolista mexicano lo había logrado. Ni Hugo Sánchez, palabras mayores en lo que a goleadores se refiere. Lo firmó Carlos Vela con una exhibición rematadora, para escribir su nombre en la historia, en un partido espectacular ante el Celta de Vigo.

Había marcado dos tantos en la Liga BBVA y de una tacada firmó cuatro y pudieron ser más. Pero Vela es un futbolista generoso, al que le gusta tanto buscar a Griezmann como saborear el gol propio. Descartado por Arsene Wenger para el Arsenal, Vela ha encontrado su sitio en San Sebastián. Feliz en la ciudad y de ser la referencia ofensiva de una Real Sociedad que ha recuperado su grandeza.

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-- RAÚL GARCÍA.

Consigue Diego Simeone tener a algunos jugadores que estaban destinados a estar en segunda línea, tenerles mentalizados para sacar máximo rendimiento a sus oportunidades y ganar importancia en el Atlético de Madrid. Raúl García es el mejor ejemplo. En el festival goleador en el derbi ante el Getafe, firmó un doblete con dos testarazos y un gran partido.

Raúl, que hasta ahora se había acostumbrado a escuchar su nombre en la lista de transferibles, esta temporada ya ha marcado siete tantos sin ser titular fijo. Cinco en la Liga BBVA y dos en Liga de Campeones. Es uno de los secretos del éxito. El jugador que suple al fijo mantiene el alto nivel de un Atlético de Madrid lanzado y ganador.

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-- JOSÉ ANTONIO REYES

Tiene magia en los derbis sevillanos, días que marcan la temporada y quitan el mal sabor de boca de meses de sufrimiento. Reyes vuelve a levantarse, superada una lesión de rodilla que le impidió comenzar la temporada, tardó más de la cuenta en superar y dejó a Unai Emery sin uno de sus referentes en el campo.

Su ficha es elevada y en la directiva sevillista se comenzaba a acabar la paciencia. Reyes debía demostrar su importancia en el Sevilla de inmediato o su sueño de retirarse en el club de su corazón comenzaría a desvanecerse. Llegó ese día especial, el duelo ante el Real Betis, y 'resucitó'. Asistió, provocó una expulsión y volvió a sentir el cariño de su afición en 70 minutos como jugador del partido. Aún tiene mucho fútbol por regalar.

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