La colombiana Duque-Mariño se instala en tercera ronda del US Open

  • La colombiana Mariana Duque-Mariño firmó la mejor actuación de su carrera en un torneo del Gran Slam de tenis, al conseguir su pase a la tercera ronda del Abierto de Estados Unidos, tras derrotar este miércoles en tres sets a la francesa Océane Dodin.

Duque-Mariño controló una rebelión de su rival en el ecuador del partido y la venció con parciales de 6-1, 5-7, 6-2 para colocarse en la ronda de las 32 mejores del último Gran Slam del año.

"Feliz, porque por primera vez llego a una tercera ronda de un Gran Slam. Es un premio a todo lo que he trabajado y me motiva mucho", dijo la colombiana al terminar el partido.

Dodi era una rival muy difícil pues venía inspirada por su sorpresiva victoria sobre la serbia Jelena Jankovic, 21ª sembrada, además de contar con golpes complicados.

"Ella es una jugadora que tiene un tiro que medio se abre, y juega muy duro cada punto. También tiene un buen saque, pero estuve bien en la devolución y eso me permitió jugarle cada bola. Creo que la sorprendió un poco eso", indicó la tenista 'cafetera'

En su siguiente salida por el pase a octavos de final, la tenista de Bogotá se medirá a la italiana Roberta Vinci, una ex 'Top 15' de la WTA que ha llegado dos veces a cuartos de final de este torneo.

"Ya jugué contra ella en Marruecos en 2009 y perdí en tres sets, sobre arcilla, pero igual es una jugadora de mucha experiencia", acotó Mariana.

Hasta ahora, la mejor actuación de la tenista de Bogotá en las canchas de Flushing Meadows había sido un boleto a la segunda ronda de la edición de 2008, tras quedar eliminada en primera vuelta en 2013.

La mejor actuación de una tenista colombiana en un Gran Slam fue las semifinales alcanzadas por la ya retirada Fabiola Zuluaga en el Abierto de Australia de 2004.

La misma Zuluaga alcanzó la cuarta ronda del Roland Garros (2004) y una tercera dos veces en el US Open (2003, 2004). También firmó una tercera vuelta en Flushing Meadows la 'cafetera' Catalina Castaño (2008).

Duque-Mariño, de 26 años, sueña con llegar lejos, pero por ahora dice ir poniendo un pie detrás del otro, para que el sueño se haga realidad.

"Estoy en el mejor momento de mi carrera. Tengo madurez y experiencia, entreno fuerte y sobre todo, tengo muchas ganas de triunfar", aseguró la bogotana.

Por lo pronto, ha sacado la cara por un maltrecho tenis latinoamericano, siendo la única de los 13 representantes de la región que ha podido firmar una tercera ronda en este Abierto estadounidense.

psl/cd

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