En Inglaterra están acostumbrados a los espontáneos, los 'strikers' como ellos los llaman, pero no dejaron de sorprenderse cuando un gato saltó al césped de Anfield Road durante el partido que enfrentó al Liverpool y el Tottenham el pasado 6 de febrero. El felino se paseó durante unos minutos ante la mirada de los jugadores, del público que llenaba las gradas, y de los espectadores que seguían el encuentro por televisión, ya que la realización le siguió hasta que un operario le acabó sacando del terreno de juego. Fue su lanzamiento a la fama.
Había nacido una estrella, y necesitaba un nombre. En el Centro de acogida de animales de Freshfields, donde le llevaron tras su fulgurante aparición, decidieron llamarlo Shanks, en honor del mejor entrenador de la historia del Liverpool, Bill Shankly.
"No es un gato agresivo, es tímido y reservado, aunque sí creemos que es un poco mujeriego" afirmó Katherine Gibbs, una de las asistentes en Freshfields. Precisamente justificaron las múltiples heridas que presentaba en su cuerpo por peleas con otros felinos en celo. Además, le detectaron la sarna y descubrieron que le gustaba el pollo.
En internet se multiplicaron los vídeos que reflejaban su incursión durante el partido del Liverpool, y la cuenta de Twitter que un seguidor 'red' creó en su honor (@anfieldcat), comenzó a sumar con rapidez seguidores hasta los más de 60 mil followers que acumula actualmente.
A Shanks le dieron un trato especial en centro de acogida: tuvo una "habitación" propia decorada con una bufanda del Liverpool y fotos de su homónimo, Shankly, en las paredes. Aunque en Freshfields estaban encantados con él, ya que gracias a su presencia muchas personas se habían acercado hasta sus instalaciones para conocerle y ver otros gatos, el fin último era que Shanks encontrara una casa, un nuevo hogar. Unos días después, lo logró.
Cuando la historia parecía tener un final feliz, Shanks ha regresado a las portadas de muchos medios digitales. El motivo: su huída del hogar de acogida en el que vivía. Helen Stanbury, la gerente del centro Freshfields, fue la encargada de comunicar a los medios la noticia. Afirmó que se escapó por una gatera, solicitó ayuda a los vecinos para dar con él, y apuntó que lo más probable era que sus instintos le llevaran a los alrededores de Anfield Road. Los seguidores del Liverpool esperan descubrir en el próximo partido que jueguen en casa que esto es cierto, que Shanks ha decidido volver a la que es su verdadera casa.
No podían faltar los que se lo toman con humor
Dentro de la pena que ha provocado su desaparición en toda la ciudad del Mersey (al menos en la parte que es seguidora del Liverpool), algunos han optado por buscarle el lado gracioso para quitarle trascendencia a la situación. En los foros de seguidores red han surgido dos teorías: que Roman Abramovich, el dueño del Chelsea, ha pagado 30 millones de libras por él (como ya hiciera con Fernando Torres hace un año), o que Shanks ha optado por viajar a Londres, para presenciar en directo, desde la hierba de Wembley, la final de la Carling Cup que 'su' equipo juega ante el Cardiff City.
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