La hora de la verdad para Unai Emery

El currículo de Unai Emery en el Valencia tiene dos lecturas. Una, positiva, se centra en el campeonato de Liga, donde ha sido capaz de situar al equipo arriba salvo en la primera temporada, que finalizó con un mal sexto puesto a 25 puntos del campeón. El año pasado, el técnico vasco dejó al Valencia en tercera posición, el primero de la otra Liga que juegan todos los equipos menos el Barcelona y el Real Madrid. Este año va por el mismo camino.

La lectura negativa pone el énfasis en que no ha ganado ningún título, es más, ni siquiera ha estado en la pelea por ellos. Emery tiene colgado el sambenito de entrenador que falla en las grandes citas. En Europa, el Valencia cayó en dieciseisavos de final de la Copa de la UEFA en la temporada 2008-08. El rival, el Dinamo de Kiev. Hace un año, fue eliminado en cuartos de la misma competición (ahora llamada Liga Europa) por el Atlético con un polémico penalti a Zigic no pitado. En la Copa del Rey tampoco ha llegado lejos: cuartos en 2009 y octavos en 2010 y 2011.

Cuando fichó por el club de Mestalla, procedente del Almería, lo hizo por dos temporadas. La clasificación directa para la Champions la temporada pasada le permitió ampliar su contrato una campaña más, ésta que está en curso. Ahora, Emery tiene que ganarse de nuevo la confianza de Manuel Llorente. Hace unos días, el máximo dirigente del club declaró que no renovará automáticamente a su entrenador si acaban la Liga en tercera posición. Llorente quiere eso y que llegue lejos en la Champions.

Máxima exigencia sin las estrellas del equipo

Sorprende la actitud de Llorente porque Emery está logrando buenos resultados con un equipo que vendió en verano a dos de sus tres principales figuras, Villa y Silva, y sólo utilizó parte del dinero obtenido para cerrar nuevos fichajes porque había que tapar agujeros económicos (y sigue habiéndolos). Con Mata al frente del proyecto, y con los refuerzos de Soldado (10 millones), Tino Costa (6), Topal (5) y Aduriz (4), hay que tomar el estadio de Genselkirchen sí o sí según el dirigente, al que sólo le importa ganar.

El Schalke 04 defiende el empate a uno de Mestalla (¡qué daño ha hecho el gol de Raúl!), lo que obliga al Valencia a marcar. Los alemanes no pierden en su campo desde el 27 de noviembre de 2008, ante el Manchester City. Esta temporada han saldado con victorias sus partidos, aunque en la Bundesliga flojean y han perdido cinco de los 13 encuentros disputados en el Arena AufSchalke.

Habrá que ver el planteamiento que saca Emery en Alemania después de que en el partido de ida dejara al equipo sin alas por la ausencia de Joaquín y Vicente. Por lo menos ha recuperado a Mata para este partido en el que está en juego su futuro. ¿Arriesgará? ¿Mantendrá su esquema?

Pasar a cuartos de final de la Champions sería un espaldarazo para el trabajo de Emery, muy cuestionado desde la gradaantes de las vacaciones de Navidad. El de Hondarribia habría metido al Valencia entre los ocho mejores de Europa. Una gesta con esta plantilla y los problemas económicos del club. Llorente ya no podría ponerle más pegas.