La IAAF contraataca para limpiar su imagen

En dos comunicados distintos, uno de la IAAF y otro del presidente de su Comisión de Ética, la Federación que dirige el principal deporte olímpico intentó hacer un ejercicio de transparencia, revelando las acciones que ha emprendido para esclarecer los hechos.

Cuatro personas son objeto ya de una investigación en forma de procedimiento disciplinario y son nombres de gran peso: Gabriel Dollé (responsable de la lucha antidopaje hasta diciembre de 2014), Pape Massata Diack (uno de los hijos de Lamine Diack), Valentin Balakhnichev (tesorero de la IAAF hasta diciembre de 2014 y expresidente de la Federación Rusa) y Alexei Melnikov (exentrenador ruso de marcha).

Otra persona está también siendo investigada, sin que se revelara el nombre, ya que por el momento no se inició formalmente ningún procedimiento disciplinario contra ella.

Esa persona podría ser el expresidente de la IAAF Lamine Diack, que estuvo en el puesto 15 años, hasta agosto de este 2015. El senegalés fue imputado esta semana por la justicia francesa por corrupción pasiva y blanqueo agravado.

Los responsables inculpados son sospechosos de haber recibido sumas de dinero en contrapartida a ocultar prácticas dopantes, especialmente en Rusia.

En este caso, revelado por reportajes de la televisión alemana ARD en diciembre de 2014 y agosto de 2015, Gabriel Dollé está también imputado, al igual que el asesor jurídico de Lamine Diack, el abogado Habib Cissé.

Sobre los procedimientos disciplinarios, la IAAF precisó que las audiencias de las cuatro personas tendrán lugar en Londres del 16 al 18 de diciembre. Las mismas serán privadas.

"La decisiones del panel de expertos (destinado a evaluar esos casos) se harán públicas lo más rápidamente posible", escribió el presidente de la Comisión de Ética, Michael Beloff, en un comunicado.

En lo que se refiere a la auditoría de las prácticas financieras, actualmente en curso, la IAAF indica que ha hecho el encargo a "una empresa internacional de expertos contables independientes".

La misión para la misma es hacer "un examen profundo de los controles operacional y financiero en vista a identificar cualquier debilidad, así como hacer recomendaciones sobre mejores para asegurar que la IAAF opera un control interno de la mejor calidad".

En plena crisis, la IAAF anunció además la anulación de su tradicional gala de final de temporada, inicialmente prevista para el 28 de noviembre en Mónaco.

Se esperaba allí la presencia de Usain Bolt para recoger el galardón de mejor atleta masculino de 2015, que seguramente conseguirá tras sus tres oros mundiales en Pekín-2015.

"Teniendo en cuenta las nubes que ensombrecen a nuestra asociación, no es el momento para que la familia del atletismo celebre nuestro deporte", subrayó el nuevo presidente de la IAAF, Sebastian Coe.

Los premios se entregarán a los ganadores, pero más tarde y en otras circunstancias menos convulsas.

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