Este fin de semana, los propietarios de todas las franquicias de la NBA se reunirán con motivo del All-Star de Toronto, y tendrán un tema primodial a tratar. La liga les ha propuesto tener publicidad en las camisetas por primera vez a partir de la temporada 2017/2018, y la mitad de los ingresos obtenidos se destinarán a un fondo común para todos los equipos.
Se trata de una medida revolucionaria por dos motivos. En primer lugar, nunca antes en la historia de la NBA los equipos habían tenido publicidad en sus camisetas.
En segundo lugar, la decisión que se debatirá en el All-Star busca un mayor nivel de igualdad en la competición.
Con el fin de reducir la disparidad en el mercado entre grandes ciudades con respecto a las pequeñas, la liga propone que el 50% del dinero de la publicidad en las equipaciones sea para cada equipo, mientras que la otra mitad será destinada a un fondo común que se repartirá entre las 30 franquicias de la NBA.
El comisionado de la NBA ya discutió la posibilidad de los anuncios en las camisetas en 2009, el mismo año que tanto la WNBA (NBA femenina) y la NFL (liga de fútbol americano) se decidieron a introducir la medida.
En 2011, el actual comisionado de la NBA Adam Silver sugirió que publicitar las camisetas podría suponer 100 millones de dolares de ingresos al año.
Sin embargo, la iniciativa cayó en saco roto dado que las televisiones se alarmaron al conocer que tendrían que pagar altos costes a marcas que no se anunciaban en televisión, tan solo porque se anunciarían en las camisetas.
Cinco años más tarde, parece que la medida llegará a buen puerto. La reunión entre los máximos dirigentes de todas las franquicias de la NBA dictará sentencia.
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