La penitencia del Fuenlabrada

Miguel Ángel Moreno

Madrid, 24 feb.- El Baloncesto Fuenlabrada sufrió el pasado sábado en su feudo del Pabellón Fernando Martín una dura derrota frente al Cajasol de Sevilla (75-84), en la que los hispalenses dominaron desde el inicio y por la que todo el equipo tendrá que "pagar penitencia", según reconocía el técnico Chus Mateo.

La derrota fuenlabreña, en un partido en el que estuvieron por detrás en el marcador desde el primer momento con un parcial de salida 2-15 a favor de los pupilos de Aíto García Reneses, se produjo en un partido en el que el equipo tenía la posibilidad de acercarse a los puestos cabeceros.

"Nuestra cabeza daba la impresión de que no estaba en el partido de hoy. Un partido para nosotros muy importante, para dar un salto en la clasificación, porque era un equipo al que podíamos seguramente ganar si hubiéramos hecho las cosas bien desde el primer minuto", reconocía Chus Mateo en rueda de prensa tras el encuentro.

"Todos tendremos que pagar nuestra penitencia, nuestra penitencia es trabajar, mejorar y hacer las cosas mucho mejor de lo que lo hacemos, y no pensar que somos mejores de lo que somos. Somos un equipo que tiene que trabajar cada día para ganarse la victoria, y el día que no lo hacemos, perdemos", agregaba el técnico.

Mateo, que se reconocía "realmente enfadado" con la defensa y la intensidad de sus jugadores, que permitieron a los hispalenses llegar a un 68 por ciento de acierto en tiros de dos al descanso, aseguraba que no salvaba "a nadie" del mal partido, y que era una "lección de grupo" la que recibieron el pasado sábado.

La diferencia de 14 puntos al descanso a favor de los sevillanos (29-43) incluía también una amplia distancia en rebotes (9 locales por 27 visitantes), y la falta de agresividad de los madrileños proseguía durante el tercer cuarto, en el que cometían menos faltas que sus oponentes (12 de Fuenlabrada por 17 de Cajasol) pese a que iban perdiendo (51-67).

Sin embargo, la reacción local en el último periodo, que les permitió estrechar la diferencia hasta dos puntos en el último minuto, permitió equilibrar los guarismos en rebotes (30-35, con tres de Diagné y tres de Cabezas en el último periodo) y mostrarse más agresivos en las personales (23-22 al final).

Con la derrota, el equipo del sur de Madrid continúa decimocuarto con siete victorias, a tres de los ocho primeros, cota que marca Cajasol con 10 triunfos, pero distanciado del gran grupo que cuenta con 9 (Bilbao Basket, Río Natura Monbus, FIATC Joventut, Iberostar Tenerife) y a una de Gipuzkoa Basket.

Pese a todo, el 'Fuenla' mantiene la distancia de dos victorias con los puestos de descenso, que marca UCAM Murcia tras su derrota ante Unicaja, con las mismas victorias que Tuenti Móvil Estudiantes y tres más que Valladolid.

Si hay un aspecto positivo que el equipo madrileño puede reseñar es el de la recuperación del base malagueño Carlos Cabezas. El internacional y campeón mundial con España jugó 27 minutos, en los que hizo 15 puntos, 4 rebotes, 4 asistencias, 3 faltas y tuvo 14 de valoración. Salió desde el banquillo y protagonizó sus mejores minutos en la segunda mitad, donde contribuyó a la remontada.

Aunque el toque a la plantilla es seguro después de la mala imagen dada ante su afición en los dos primeros cuartos, parece que Chus Mateo tiene su continuidad asegurada.

Los madrileños tendrán la oportunidad de resarcirse ante sus hinchas el próximo domingo a las 12.15 horas frente al CAI Zaragoza, un partido complicado frente a un equipo de la parte alta de la tabla, en la que la actitud será uno de los aspectos que los hinchas mirarán con lupa.