San Sebastián, 24 mar.- La huida de los puestos de descenso que protagonizó el Lagun Aro la pasada semana ha quedado sin efecto tras su derrota ayer en Vitoria, donde no ha ganado nunca, lo que le obliga a retornar a las plazas de peligro en las que ha estado situado catorce de las quince últimas jornadas.
Los donostiarras tenían sus esperanzas puestas en el encuentro del Buesa Arena porque, aunque la lógica dictaba derrota segura como los anteriores seis antecedentes, el Lagun Aro venía de ganar cuatro de los cinco últimos encuentros.
El poderío vitoriano, sin embargo, sigue siendo incuestionable cuando ambos conjuntos se enfrentan e imperó la estadística que dice que el equipo entrenado ahora por Sito Alonso sólo ha ganado dos de las doce oportunidades en las que se han enfrentado.
Producto de todo ello es que el Lagun Aro vuelve a ocupar las plazas de descenso en las que entró en la undécima jornada con su derrota ante el Herbalife Gran Canaria, escapó tras ganar al UCAM Murcia hace ocho días y retornó en la jornada veintiséis.
Las sensaciones que emite el equipo de San Sebastián, sin embargo, son buenas y ante el Caja Laboral, al que dominó claramente en el primer cuarto, no pudo jugar uno de sus mejores hombres como es el americano Qyntel Woods.
Recuperar al excelente, aunque irregular alero con larga experiencia NBA, es el principal reto para Sito Alonso de cara al próximo partido de Liga que le enfrentará al Baloncesto Canarias el próximo sábado.
A día de hoy parece, sin embargo, casi imposible que pueda jugar Woods ese encuentro clave para su equipo.
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