La derrota del Real Madrid en el Ciutat de Levante en la primera vuelta de la Liga BBVA dejó varias heridas en el equipo blanco, que vivió su noche más negra de la temporada, derrotas con el Barcelona al margen. Ahora, los de José Mourinho tienen la oportunidad de saldar esas cuentas pendientes. La primera, la de los puntos.
La trayectoria del Real Madrid en esta Liga es casi inmaculada. En 21 partidos, lleva 18 victorias, un empate (Racing) y dos derrotas (Levante y Barcelona). Es indudable que el equipo local querrá brindar una victoria a su afición en el Santiago Bernabéu, al fin y al cabo para eso les pagan. Además, también es indudable que las ganas de los futbolistas blancos serán mayores si cabe por la derrota en la ida.
El tropiezo ante el Levante en la cuarta jornada llegó acompañado de la polémica y con una acción, la expulsión de Sami Khedira, que marcó el partido. En esa acción, su compañero Ángel Di María fue el gran protagonista, pero el alemán fue el expulsado. El argentino sufrió una falta no pitada, hizo otra y luego simuló una agresión que no existió. Sergio Ballesteros, del Levante, recriminó el piscinazo a Di María, para irse luego al suelo con facilidad ante el empujón de Khedira, que pagó los platos rotos con su torpeza.
De esa acción, y del partido en general, quedó una dura declaración del entrenador del Real Madrid, José Mourinho,en la posterior rueda de prensa: "Khedira ha caído en la trampa del Levante y, en parte, lo responsabilizo por la derrota, pero el árbitro también tiene su culpa. También es culpa mía y del resto de jugadores", afirmó 'Mou'.
El centrocampista alemán podría volver a jugar ante el Levante después de llevar varias semanas lesionado. La baja por una lumbalgia de Lass Diarra le abre la puerta de la titularidad ante el Levante, el equipo que le dejó marcado al principio de la temporada.
Polémica con el juego duro
También se quejó Mourinho del juego duro del rival, que en palabras del técnico madridista no fue cortado por el árbitro, Turienzo Álvarez, aunque éste sacó siete amarillas a los granotas. En especial, los jugadores del Real Madrid se quejaron de una entrada por detrás de Rubén Suárez a Cristiano Ronaldo. Para los futbolistas locales, no existió el juego violento que les achacaban sus rivales.
Ahora, el portugués y sus compañeros tienen la oportunidad de dejar al Barcelona a 10 puntos si logran la victoria ante los granotas. Acercarse un poco más al título de Liga es un acicate todavía mayor que las ganas de revancha que puedan tener los blancos con su rival.
Hemos bloqueado los comentarios de este contenido. Sólo se mostrarán los mensajes moderados hasta ahora, pero no se podrán redactar nuevos comentarios.
Consulta los casos en los que lainformacion.com restringirá la posibilidad de dejar comentarios