Las grabaciones muestran a Fuentes apurado por la falta de material en 2006

  • Eufemiano Fuentes tuvo dificultades para atender, por falta de material, los tratamientos programados a ciclistas como el italiano Ivan Basso entre el 12 y el 15 de mayo de 2006, según las conversaciones telefónicas intervenidas por la Guardia Civil escuchadas hoy en el juicio de la Operación Puerto.

Madrid, 5 mar.- Eufemiano Fuentes tuvo dificultades para atender, por falta de material, los tratamientos programados a ciclistas como el italiano Ivan Basso entre el 12 y el 15 de mayo de 2006, según las conversaciones telefónicas intervenidas por la Guardia Civil escuchadas hoy en el juicio de la Operación Puerto.

Las grabaciones efectuadas pocos días de la detención del médico canario, que se produjo el 23 de mayo, muestran sus conversaciones, desde diferentes números, con el hematólogo José Luis Merino, que se había ausentado de Madrid y al que transmite sus apuros por no disponer de suficiente glicerol ni SAG-Manitol, dos sustancias usadas para la congelación y la conservación de la sangre.

La preocupación de Fuentes le llevó a decir a su socio que estaba pensando regresar a Las Palmas, que "estaba histérico" y que se sentía "impotente" porque era "un fin de semana importantísimo", ante lo que el hematólogo le transmitió que iba a intentar conseguir las sustancias en hospitales en los que tenía contactos y, en caso de lograrlo, le propuso optar por una solución casera.

"He llamado a Sevilla, Granada, Córdoba. Voy a ver en la fábrica de las Fuerzas Armadas, a ver si nos pueden dar de eso... con independencia de que lo podamos hacer nosotros", comentó Merino, que le sugirió hacer una solución salina con alcohol.

El hematólogo, cuya causa está archivada por enfermedad, le planteó a Fuentes que "en sustitución del SAG-Manitol" podría poner "glucosalino" y le indicó que "para esterilizar, el mejor método es una olla express" y pasarlo después a "un recipiente estéril".

Ante las dudas expresadas por Fuentes sobre ese método -"¿Y no revienta la botella?", preguntó-, Merino respondió: "Bueno, eso hay que verlo. Si es cristal se raja. Bueno, hacemos la prueba, pero eso es una chuminada campestre... la fórmula hay que prepararla y andando. Cien por cien no te garantizo que se pueda hacer".

Fuentes a su vez recriminó a Merino que "en enero" le había dicho que debían "hacer un pedido grande" y que tendrían que "tener de todo", a lo que el hematólogo le contestó que se había "hecho mucho", aunque fue él quien "calculó mal".

"Si miras la programación que tenía, verías lo que tocaba hacer hoy, pero por este teléfono me da hasta miedo decírtelo... Yo tengo que sacar adelante esto porque el responsable soy yo. Birillo está esperando y qué le digo a Birillo, ¿que no hay comida?", comentó Fuentes en alusión a Ivan Basso.

Ante la sugerencia de Merino de que "Birillo espere hasta el lunes", Fuentes respondió que era "imposible".

"Se va el carro, a un sitio que es imposible llevárselo. Ya buscaré: si no hay salchicón buscaré chorizo o queso. Le habíamos prometido unos polos a Birillo que los traías tú, si resuelves eso me harías un gran favor", añadió.

"Creo que con eso atiendo lo urgente, a los que vienen del extranjero, el alemán y el italiano, a los demás que les den por... Voy a dar prioridad a los que están en plena batalla. Son siete los que están en guerra, en pleno proceso y los que lo necesitan", comentó Fuentes a Merino en alusión a los corredores que estaban disputando el Giro.

En otras de las conversaciones escuchadas hoy en la sala, Fuentes reconoció a Ignacio Labarta, otro de los acusados en el juicio de la Operación Puerto, que "había engañado a la máquina". "He hecho mil trampas. Si me sale, me caso", afirmó.

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