Liga BBVA: manual para convertirse en el fichaje del verano

Si quieres fichar por un equipo y tu actual club no facilita la salida toma nota porque te contamos cómo presionarles para cambiar de camiseta.

Ponerse en rebeldía.

El jugador quiere salir a toda costa del club en el que está. La nueva moda de los futbolistas es declararse en rebeldía: no se entrenan con los compañeros y se niegan a hacer la pretemporada de turno.

"Desde pequeño quería jugar en este equipo".

Esta es la frase que suele emplear el jugador cuando las negociaciones están enquistadas. Con eso conseguirá que la afición de su actual club ya no le quiera, los directivos se molesten y aceleren el pase. No quieren a un jugador que no siente la camiseta.

Se escribirán ríos de tinta.

El susodicho será portada de todos los medios europeos, abrirá telediarios y será el tema del día tanto en los medios como en la calle.

En la presentación hay que besar el escudo.

Tras muchas semanas de negociaciones el fichaje es un hecho. Miles de personas acudirán a la presentación. Para agradecer el cariño el flamante fichaje se agarrará el escudo de la camiseta y lo besará jurando amor eterno.

La rueda de prensa, un clásico.

Por si aún no había quedado claro que el jugador está muy feliz por llegar a la nueva ciudad y al equipo, en rueda de prensa dejará algunas perlas que todo jugador estrella las tiene muy bien aprendidas: "Desde que sabía del interés, hice todo lo posible por llegar aquí." Ronaldo, Benzemá, Falcao o Ibrahimovic dejaron para el recuerdo este chascarrillo clásico entre los futbolistas.

El futbolista una vez más le estará eternamente agradecido a los directivos y el " voy a demostrar en el campo que no se han equivocado al ficharme."

Por último, la estrella elogiará al nuevo entrenador y dejará claro que no es problemático. "Mi posición ideal es (cada jugador dirá la que quiera) pero el míster sabe que me amoldo a su esquema."