Londres 2012: España apela a la defensa para vencer a Francia

Nunca una victoria fue tan sufrida. Estos chicos de la geenración de oro nos tienen demasiado bien acostumbrados a ganar, pero que siga así. Ante Francia, a la que ya vencimos en la final del Europeo el verano pasado, España tuvo que recurrir al trabajo, al sacrificio, a la defensa para poder ganar. Por una vez, la calidad ofensiva se dejó de lado para bajar a niveles terrenales y luchar y sudar como cualquier otro. El trabajo tuvo su recompensa y se consiguió pasar a semifinales tras eliminar a los galos por 59-66.

El quinteto inicial prometía. Scariolo apostó por la calidad y sacó a lo mejor que tenía en el banquillo. Calderón, Navarro, Rudy y los hermanos Gasol eran, en prinipio, los encargados de para a los franceses. Algo que les costó sangre, sudor y lágrimas. Ni siquiera la zona 2-3 planteada por Scariolo impedía a los franceses anotar.

Apoyados en su rapidez de piernas y en la calidad de Parker, los galos empezaron liderar el marcador. Además, los franceses apenas concedían contrataques y España empezaba a no sentirse a gusto sobre el parqué. Tan sólo Pau Gasol -que acabó con 10 puntos- mantenía al equipo en el partido. Los de Scariolo no aprovecharon los tiros cómodos desde el triple y los muchos tiros libres de los que dispusieron y acabaron marchándose al descanso tres puntos abajo (37-34), demasiado poco para lo que se había visto.

Amago de reacción

Tras el intercambio de pistas, España pareció querer dar un nuevo aire al partido. Con el quinteto inicial en pista la premisa parecía clara: correr y mover el balón. Navarro y Rudy intentaron enchufarse en el partido, pero no era el día de ninguno de los dos.

Por su parte, Parker metió en el partido a Diaw y a Batum, quienes empezaron a hacerse dueños de la pintura. A falta del jugador de los Spurs, ellos tiraron del carro galo, intimidando en su tablero y anotando bajo el aro español. Sin embargo, Marc Gasol no quería ponérselo tan fácil y tomó el relevo de su hermano. Así, a falta de un sólo cuarto España era capaz de ponerse a dos puntos (53-51).

Nadie quiere ganar

Eso pudo parecer durante el último cuarto. Después de seis minutos jugados, el parcial de ese cuarto era 4-7 favorable a España. Los ataques en ambos campos se sucedían pero ninguno de los dos equipos era capaz de anotar. Scariolo volvió loco a los galos con la defensa zonal y, cuando éstos eran capaces de anotar, volvía a defensa individual.

Por su parte, España seguía con su tarde oscura en el tiro, en la que nadie era capaz de anotar. Así lo reflejó la estadística al final: 4/20 en triples y 20/29 en tiros libres. Tras casi cuatro minutos sin que ninguno anotara, fue Rudy el que metiódos tiros libres, dando a España una diferencia de tres puntos.

A Francia se le escapa el partido y se cabrean

Ni dos tiempos muertos sirvieron a los franceses para anotar. El aro español se les había hecho muy muy pequeño. Y los poco tiros que podían ir dentro los barría Ibaka. Una canasta de Pau Gasol sentenció un partido que, al final, se volvió muy feo. Turiaf y Batum no se tomaron bien eso de perder y agredieron a Rudy y Navarro respectivamente.

Ambas acciones fueron saldadas con sendas antideportivas y, entonces sí, España sentenció desde el tiro libre. La canasta final de Gelabale de poco servía a Francia, que veía cómo, una vez más, España se interponía entre ellos y el oro. Los galos solo pudieron anotar seis puntos en el último cuarto. El luminoso indicó un paupérrimo pero suficiente 59-66. España está en semifinales de los Juegos Olímpicos.