Los colegiales dispuestos a ganar la madre de todas las finales

Madrid, 5 may.- Asefa Estudiantes está dispuesto a ganar la madre de todas la finales, aún a sabiendas que ni superando con sobresaliente esta última prueba tiene asegurada la permanencia en la categoría, al depender de otros resultados.

"Estamos bien y hemos hecho un buen trabajo. Ahora hay que ganar al Murcia, independientemente de la diferencia de puntos, y luego ya veremos", comentó Germán Gabriel.

El pívot colegial ha tenido problemas físicos en los últimos días, pero su concurso en el equipo es fundamental y jugará el último partido sí o sí.

"Llegas a un punto en el que, mientras se descarte cualquier cosa peligrosa, todo tipo de molestia hay que afrontarla. El equipo necesita todo el apoyo y entonces te olvidas de tu estado físico y quieres estar ahí", dijo Gabriel que eludió mencionar la palabra 'descenso' y que resaltó una frase: "acabar con el trabajo bien hecho".

Las cuentas de Estudiantes son clara y terribles. Si el Mad-Croc Fuenlabrada pierde en Alicante y el Blusens Monbus gana al CAI Zaragoza da igual lo que hagan los madrileños, estarán descendidos.

A partir de aquí se abren algunas posibilidades de salvación. Si los de Fuenlabrada y los de Santiago hacen lo mismo, ganar o perder, Estudiantes necesita ganar por 14 puntos o más al Murcia para mantener la categoría.

Y el mejor escenario para los colegiales sería que el Mad-Croc Fuenlabrada ganara en Alicante y que el Blusens Monbus perdiera contra el CAI Zaragoza. En este caso con ganar al UCAM Murcia en el Palacio de Deportes de Madrid se conseguiría el objetivo.

"El domingo es lo único que nos queda", dijo el capitán Carlos Jiménez, "desafortunadamente dependemos de otros resultados, pero en lo que a lo que nosotros compete, debemos intentar hacerlo lo mejor posible".

Después de la vía deportiva estaría la vía administrativa, mantener la categoría por la desaparición de algún equipo con deudas o que alguno de los que asciendan no puedan cumplir con los requisitos económicos de la Liga.

Estudiantes y su afición, de momento, confían en el equipo y en sus jugadores.