San Sebastián, 27 oct.- La Real Sociedad, ante la sequía goleadora de sus jugadores de ataque, se ha refugiado en la aportación de sus defensas, convertidos ahora en el mejor argumento para el gol, que podría seguir rentabilizando el sábado ante el Real Madrid.
Los zagueros realistas han sido los artífices de cuatro de los últimos cinco goles del equipo, que se han traducido en tres de los cuatro puntos logrados en el último mes y medio de competición.
Dani Estrada marcó ante el Granada el gol del triunfo en la última victoria de los donostiarras esta temporada, el 20 de septiembre, y ayer volvió a hacer lo propio en el 0-1 que ofreció a la Real una ventaja momentánea en el Ciutat de Valencia que luego dilapidaría.
Su compañero, el jovencísimo central Íñigo Martínez, ha marcado en este periodo también otros dos goles, el de ayer y ante el Athletic en el derbi vasco, aunque en ningún caso ni uno ni otro valieron para mucho en la tabla.
Imanol Agirretxe, en Mallorca, completa la lista de los últimos goleadores blanquiazules, lo que deja en evidencia que, a día de hoy, la aportación foránea es inexistente, y ello a pesar de que dos de los cuatro delanteros del equipo, Diego Ifrán y Carlos Vela, son refuerzos extranjeros.
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