Bilbao, 21 oct.- El jugadores del Bilbao Basket prefieren ser "positivos" antes que negativos a pesar del mal inicio liguero, en el que han sumado dos derrotas consecutivas, la segunda de ellas tras desperdiciar una clara ventaja en su visita al Baloncesto Fuenlabrada, según ha asegurado hoy Raúl López y Roger Grimau.
"Prefiero quedarme con lo positivo", ha dicho el base internacional tras el entrenamiento vespertino de hoy de su equipo en el Bilbao Arena, la última sesión de trabajo antes de viajar mañana a primera hora a Italia, donde el miércoles se medirá al Dinamo Banco di Sardegna Sassari (Palaserradimingni, 20.30 horas) en la segunda jornada de la Fase Regular de la Eurocup.
Raúl ha coincidido con Grimau en que, a pesar de la derrota, y la forma en la que se produjo, el de Fuenlabrada fue "el mejor partido" de los cinco oficiales que el equipo bilbaíno lleva esta temporada.
"Me gusta ser positivo y ver las cosas buenas. Siempre que no ganas hay preocupación, pero prefiero ver las cosas con optimismo, ver la botella medio llena y esperar a que lleguen las victorias. A veces las cosas no salen como quieres y no hay que darle más vueltas. La línea que llevamos, a pesar de las derrotas y de que no estamos pudiendo ganar, va un poco hacia arriba", ha dicho Grimau.
El alero catalán, de todos modos, asume que lo ocurrido en el Fernando Martín, caer ante un rival a priori inferior y después de gozar de amplias ventajas, es "algo que no tiene que pasar" más al conjunto vasco.
El Bilbao Basket, por otro lado, se encuentra ya a solo dos días de su segundo compromiso europeo del curso, un choque ante un Dinamo Sassari del que Grimau ha avisado que "tira mucho, mete mucho y falla mucho". Es decir, que juega "a tanteos altos" y, "si puede tirar en un segundo, no tarda segundo y medio",
"El Sassari es de los equipos más ofensivos del grupo y nos va a dificultar la tarea defensiva", ha adelantado un Raúl que no quiere acordarse demasiado de los triples que falló casi sobre bocina que podían haber dado la victoria a su equipo tanto el domingo en Fuenlabrada como en el choque amistoso del pasado 6 de octubre frente al Philadelphia 76ers de la NBA en Bilbao.
"Las jugadas de final de partido no suelen salir muchas veces, no se suelen dar buenos porcentajes en ellas, pero fueron dos buenos tiros. Ni cuando entran estás muy contento ni cuando fallas te vienes abajo", ha apuntado al respecto.
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