Marcelo Oliveira, un entrenador que llega a la elite de técnicos brasileños

  • El entrenador del Cruzeiro, Marcelo Oliveira, un arduo trabajador fuera del campo, ganó hoy su segundo título de manera consecutiva en la liga e inscribió su nombre en la elite de los técnicos consagrados del país.

Waldheim García Montoya

Sao Paulo, 23 nov.- El entrenador del Cruzeiro, Marcelo Oliveira, un arduo trabajador fuera del campo, ganó hoy su segundo título de manera consecutiva en la liga e inscribió su nombre en la elite de los técnicos consagrados del país.

Las dudas para quienes pensaban que la gesta en 2013 de Oliveira fue producto de la suerte fueron disipadas con el título logrado hoy por el Cruzeiro que venció en el Mineirao por 2-1 al Goiás, en juego de la antepenúltima jornada del campeonato.

El nombre de Oliveira se suma ahora al de entrenadores consagrados del país, como los exseleccionadores Luiz Felipe Scolari (Gremio), Vanderlei Luxemburgo (Flamengo) y Carlos Alberto Parreira y de otros con renombre internacional como Tité, Muricy Ramalho (Sao Paulo) y Abel Braga (Internacional).

El año pasado, Oliveira llevó al Cruzeiro al título a cuatro fechas del final del torneo y en 2014 se proclamó también anticipadamente, restando dos jornadas.

De estilo sobrio, el exfutbolista profesional sólo expresa su emoción cuando el Cruzeiro anota y en este 2014, con 64 goles, el equipo tiene la mejor ofensiva del campeonato y una de las defensas menos vulnerables con 36 tantos encajados.

Oliveira fue contratado en enero de 2013, después de que el Vasco de Gama lo despidiera tras encadenar seis derrotas al hilo y nadie pudo prever en aquel momento que el Cruzeiro sería el mejor equipo brasileño del 2013 y del 2014.

Admirador del Barcelona del Pep Guardiola, el Cruzeiro mantuvo prácticamente la misma plantilla de 2013, con jugadores de experiencia como el portero Fabio, el zaguero Dedé, el centrocampista Tinga, el media punta Julio Baptista y los atacantes Borges y Dagoberto.

Este año también la exitosa campaña ratificó a jugadores como los laterales Mayke y Egidio, a los centrocampistas Henrique y Lucas Silva, al atacante William y principalmente a los media puntas Éverton Ribeiro y Ricardo Goulart, el máximo artillero del torneo con quince anotaciones.

Un capítulo aparte merece también el ariete boliviano Marcelo Martins Moreno, una apuesta personal del entrenador en 2014 y quien retornó después de seis años al Cruzeiro para convertirse en el segundo artillero del equipo con catorce tantos y ser el delantero más temido del torneo con 86 remates de gol.

El segundo título rubrica la aprobación de la propia hinchada, que rechazó en 2013 la contratación del técnico por su fuerte vinculación al máximo rival, el Atlético Mineiro, del que Oliveira fue jugador y entrenador de categorías inferiores.

Nacido en la pequeña ciudad de Pedro Leopoldo, situada en la región metropolitana de Belo Horizonte, hace 58 años, Oliveira vive en tensión todos los partidos, como si los quisiera jugar.

El técnico se pasa los 90 minutos de todos los partidos de pie, dando indicaciones a gritos y gesticulando.

Con 17 años empezó a jugar en el Atlético Mineiro y con 24 fue cedido al Botafogo, dónde militó tres años.

Sus últimos tres años como jugador los completó en el Nacional de Uruguay, el modesto Ferroviaria de Araraquara -en Sao Paulo- y el América de Belo Horizonte, dónde colgó las botas en 1985, con 30 años.

No fue hasta 2003 cuando volvió al mundo del fútbol. Esta vez desde el banquillo, entrenó durante tres años a formaciones de base del Atlético Mineiro, su club de toda la vida, y en 2008 llegó al primer equipo.

Su mejor momento como entrenador, sin contar el actual, fue en el Coritiba, donde estuvo dos años, entre 2011 y 2012. Consiguió dos veces el campeonato paranaense y fue finalista en dos ocasiones de la Copa de Brasil, título que disputará nuevamente el próximo miércoles precisamente ante su recordado Atlético Mineiro.

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