Leo Messi y Luis Suárez dejaron boquiabierto al mundo entero con el cuarto tanto de la goleada ante el Celta de Vigo (6-1). Fue un auténtico espectáculo, una jugada de magia, de dibujos animados que se ha visto en contadísimas ocasiones en un terreno de juego.
El argentino cogió el balón para materializar el penalti que Jonny había cometido sobre él mismo. Todo parecía indicar que el '10' azulgrana iba en busca de su segunda diana de la noche. Sin embargo, se sacó de la chistera una acción que sorprendió al guardameta celeste, Sergio, y a todo el que estaba disfrutando del partido.
Messi tocó el balón sutilmente hacia delante, engañando a Sergio, que se fue al suelo. Suárez se adentró en el área y no desaprovechó la ocasión para introducir el balón en las redes rivales.
Al ver esta acción, resulta inevitable no acordarse de otras acciones parecidas que se han visto desde los once metros, unas con éxito y otras no.
En 1982, Johann Cruyff y Jesper Olsen firmaron una jugada que perdura en la memoria del fútbol, si bien difiere de la del Barcelona en el hecho de que lo que realizaron el holandés y el danés del Ajax fue una pared para que el lanzador del penalti anotara (Cruyff en este caso). Desde entonces se le denominó el penalti indirecto de Cruyff, aunque en realidad un delantero belga llamado Rik Coppens ya lo hizo en 1958.
Un despropósito fue el intento de Thierry Henry y Robert Pires en el Arsenal. Ante el Manchester City, la pareja gunner quiso emular lo visto en los ochenta en aquel partido entre el Ajax y elHelmond Sport, pero el toque de Pires fue defectuoso y la jugada mágica que querían realizar acabó en ridículo.
La forma de ejecutar el penalti sorprendió incluso a algunos de sus compañeros del Barcelona. Andrés Iniesta reconocía que lo habían preparado y dio a entender que la jugada la tenían ideada entre Messi y Neymar: "Igual el penalti era para Ney, pero estaba Luis por ahí y se ha metido en la jugada. No lo vi entrenado. Pero sí muy hablado".
Dani Alves también se lo tomaba con humor: "Este penalti de Messi y Suárez si sale bien te quedas muy contento sino quedas retratado". Y Jordi Alba ni se lo esperaba: "No lo practican en el entrenamiento, pero Messi es el mejor, siempre inventa cosas".
Los jugadores del Celta no pudieron hacer más que resignarse y mirar con la boca abierta a la jugada mágica de Messi y Suárez. Cabral, uno de los defensas celestes, aseguraba que "es raro porque no se ve a menudo. No estuvimos atentos, molesta un poco pero es válido. Molesta porque ha sido gol, no por la forma de tirarlo. Ellos pueden hacer la jugada como quieran".
Para el técnico del Celta fue "un penalti ejecutado de manera diferente, nada más".
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