Vigo, 19 feb.- Carlos Mouriño, presidente del Celta de Vigo, justificó hoy su decisión de destituir a Paco Herrera, tan sólo dos meses después de ofrecerle la renovación "aunque el equipo acabe descendiendo", en la necesidad de encontrar "un revulsivo" que logre enderezar el rumbo del equipo, inmerso en la zona de descenso a Segunda.
"Los resultados me han llevado a perder la confianza en Paco Herrera. En los últimos partidos el equipo no estaba al nivel del principio y creemos que eso podía requerir un cambio. Los resultados a lo largo de la temporada no han sido excesivamente malos, pero lo más preocupante era la forma del equipo", indicó el dirigente celeste.
"Ver al equipo caer ante el Osasuna, luego frente al Espanyol o en Getafe el otro día nos hizo pensar que si queríamos mantener la categoría era necesario un cambio de entrenador", agregó Mouriño al ser cuestionado por este asunto durante la presentación de Abel Resino, sustituto de Herrera en el banquillo de Balaídos.
El máximo accionista del club gallego, que no comunicó a Herrera su destitución hasta ayer al mediodía, cuando ya llevaba desde el día anterior hablando con Resino, se defendió alegando que "el Celta sólo se pronuncia cuando los contratos están firmados".
"El contrato físico se firmó ayer a las dos de la tarde en Madrid, por tanto antes no había nada cerrado. Este club tiene una política y nosotros únicamente damos las noticias cuando se producen. Nuestra idea nunca fue tener una desconsideración de ese tipo con Paco, porque para nosotros él es más que un entrenador, es un amigo", explicó.
Muy tenso durante toda su intervención, Mouriño asumió su "culpa" por la filtración que desde el club se realizó la noche del domingo a un periódico local- Faro de Vigo- porque, a su entender, que se adelantara la noticia de la llegada de Abel le hizo "un daño tremendo" al Celta.
"Hubo un medio que se adelantó y eso nos causó un daño tremendo, y lo asumo como presidente. Es una información que no debió salir del club pero salió, por eso tengo que responsabilizarme como presidente", reiteró.
El presidente del Celta también desveló que la noche del sábado, después de caer en el Coliseum Alfonso Pérez frente al Getafe (3-1), se reunió con el director deportivo, Miguel Torrecilla, para estudiar la posibilidad de buscar un nuevo entrenador.
"Tres o cuatro horas después del partido contra el Getafe me reúno con Torrecilla para analizar si es bueno ver la posibilidad de cambiar de entrenador. Entonces empezamos a buscar las alternativas que nos ofrecía el mercado, pero si no hubiese ninguna que nos convenciese Paco igual continuaba", comentó.
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