El padre de un jugador cadete del Almonte CF ha sido condenado por un juzgado a seis meses de prisión y 6.000 euros de indemnización por agredir a un árbitro. Según el parte médico que aportó el colegiado, sufrió lesiones en los testículos. Se ha visto obligado a dejar el arbitraje por recomendación médica.
Melo Domínguez tuvo que ser operado y estuvo 135 días de baja después de la agresión que recibió el 12 de febrero de 2012 en un partido entre el Almonte y el Gibraleón. El árbitro ha recordado todo lo ocurrido a la agencia EFE.
El árbitro solicitó a través del delegado de campo que todos los aficionados se colocaran en la zona habilidada, fuera de los límites del terreno de jugo. El padre del jugador cadete le amenazó y le propinó una patada en los genitales. Después le siguió hasta el vestuario y le golpeó con una silla.
Cuando Melo Domínguez aún se recuperaba de las lesiones en el hospital, recibió una notificación de denuncia por parte del agresor. En el juicio, el acusado no negó los hechos y finalmente el árbitro ha quedado, lógicamente, absuelto.
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