Nike se juega 10 millones de euros en las botas de Cristiano Ronaldo

    • Tiene paralizada la estrategia comercial y publicitaria de una multinacional que factura más de 30.000 millones.
    • El viernes y el próximo martes se disputan, a doble partido, las eliminatorias de repesca.
Ronaldo, Pepe y Coentrao se tratan de lesiones antes de la repesca
Ronaldo, Pepe y Coentrao se tratan de lesiones antes de la repesca
Ulises Sánchez Flor

Cristiano Ronaldo tiene paralizada la estrategia comercial y publicitaria de una multinacional estadounidense que factura más de 30.000 millones de euros al año. Se trata de Nike, la firma deportiva que le patrocina y de la cual es el icono, no sólo en el ámbito futbolístico sino también en el área de imagen. El viernes y el próximo martes se disputan, a doble partido, las eliminatorias de repesca para lograr la clasificación para el Mundial que se celebrará al final de esta temporada en Brasil.

La eliminación de Portugal y, por consiguiente, la ausencia de la estrella lusa del Real Madrid de la mayor cita futbolística a nivel de selecciones significaría el fracaso de Nike. Se calcula que las pérdidas podrían sobrepasar los 10 millones de euros.

Fracaso o negocio. Estas son las dos palabras que más se nombran estos días entre los ejecutivos que cuentan las horas para que llegue el doble enfrentamiento entre Portugal y Suecia. El primer partido será en Lisboa y el segundo en Solna. Nadie se lo va a perder. El primero que estará atento al desenlace será Mark Parker, jefe ejecutivo de Nike y persona encargada de diseñar la estrategia comercial.

Una victoria de Portugal significaría el éxito rotundo de Nike. No sólo porque Cristiano Ronaldo sería uno de los principales reclamos para comercializar todos sus productos (camisetas, botas, zapatillas...) sino porque también esta firma deportiva patrocina a la selección portuguesa, que supone otra fuente importante de ingresos.

El Mundial no se juega en un país cualquiera. Se disputa en Brasil, territorio por excelencia de Nike. Así lo definen los especialistas. Si en Europa -en especial Alemania, Francia y España-, Adidas, su gran rival, parece llevar la delantera, ahora Brasil se presenta como el mercado ideal para que Nike rentabilice todas sus estrellas.

Y aquí juega un papel decisivo Cristiano Ronaldo. Mientras él está concentrado con su selección en Óvidos (Portugal), los ejecutivos de Nike cruzan los dedos en la sede de Oregón (EEUU) y tienen todas sus campañas publicitarias pendientes de que entre o no el balón, de que se clasifique para el Mundial. De no hacerlo, el impacto no sería sólo económico. También se contempla el daño en la imagen del jugador que repercute en el de la firma. Mientras Messi, jugador franquicia de Adidas, estaría meses rodando anuncios y vendiendo productos, Cristiano Ronaldo pasaría al anonimato.

Mostrar comentarios