Un árbitro denuncia amenazas de Onésimo en su vestuario y él lo niega

El exjugador Onésimo Sánchez y actual entrenador del Toledo, protagonizó un incidente con el colegiado a la finalización del encuentro de su equipo ante el Navalcarnero. Según el acta arbitral, el técnico amenazó al colegiado andaluz Peña Varela, aunque el protagonista niega los hechos.

Una vez terminado el encuentro, entrenador y árbitro se vieron las caras en el túnel de vestuarios y tras un cruce de palabras, Onésimo accedió al vestuario del colegiado, de donde fue sacado por la policía. Siempre según la versión de Peña Verala, ocurrió lo siguiente:

"Una vez finalizado el partido y en el túnel de vestuarios, el entrenador del CD Toledo, Onésimo Sánchez me esperaba en la puerta de mi vestuario dirigiéndome su mirada mientras movía la cabeza y hacía observaciones sobre mi actuación arbitral. Tras advertirle que cesara en reiteradas ocasiones, continuó en la misma actitud y le comuniqué que estaba expulsado. Tras esto, penetró detrás mía en el vestuario y se dirigió a mí en los siguientes términos: "Árbitro, a ver que pones en el acta que te denuncio". Posteriormente me acorraló en la esquina derecha de mi vestuario y me puso las manos sobre mi pecho, le dije que se marchara y no me tocara y me respondió: "Tu y yo acabamos hoy en comisaría". En ese momento entraron dos policías y se lo llevaron a la fuerza fuera del vestuario donde volvió a dirigirse a mí en los siguientes términos: "Como te atrevas a mentir en el acta te denunció".Onésimo lo niega de forma tajante

El entrador del Toledo afirmó en El Larguero de la Cadena Ser que "la mayoría de lo que ha puesto el árbitro no es cierto" y añadió que "ni le toco, ni le acorralo, ni le cojo por el pecho, ni me sacan dos policías a la fuerza".

Defiende que "hay testigos que pueden demostrar que el acta del árbitro es falsa" y afirma que fue el colegiado el que primero se dirigió a él mientras esperaba a sus jugadores en la puerta del vestuario como hace habitualmente. El colegiado le habría dicho "como me sigas mirando estás expulsado" y segundos después le informó de que estaba expulsado.

Entonces fue cuando "entró al vestuario del árbitro para preguntarle que 'si no le podía mirar', pero en ningún momento le puse las manos sobre el pecho". Onésimo se expone a una sanción de seis partidos.