Pellegrini regresó como un señor y Mou ni apareció

La imagen del saludo entre ambos técnicos, deseada por todos los reporteros gráficos,  se hizo esperar, y no se produjo hasta que los titulares de ambos equipos ya habían saltado al terreno de juego. Rompiendo la norma no escrita de que el entrenador local es el que acude a dar  mano al visitante, fue Pellegrini el que se dirigió al banquillo del Madrid. Fue un instante, rápido y fugaz, en el que portugués y chileno cumplieron con el ritual, pero en el que también quedó claro que no hay cordialidad entre ambos.

El Bernabéu, pese a vivir entregado a su actual entrenador, tiene buena memoria y reconoce a las personas que han pasado por el club e hicieron un buen trabajo. Pese a la ausencia de títulos, y a los batacazos en Copa y Champions, Pellegrini no dejó mal recuerdo entre el aficionado blanco, y por ello los aplausos fueron la tónica predominante cuando asomó por su zona técnica.

Mourinho, como si quisiera apaciguar el fuego que originó con su incendiaria rueda de prensa del pasado miércoles, apenas apareció en escena. Aunque él no tenía una hernia como Guardiola, no abandonó su asiento salvo en contadas ocasiones. También ayudó que el partido discurriera de manera cómoda y placentera para el Real Madrid, y que por tanto, no hiciera indicaciones o correcciones a sus jugadores.

En la segunda parte, con el marcador totalmente decidido, ni Mourinho ni Pellegrini dieron señales de actividad. Sentados, comentando las jugadas con sus ayudantes, vieron el discurrir de los minutos con tranquilidad el madridista, y resignación el malacitano.

El fondo sur, como es habitual, mostraron su apoyo a Mourinho

Esta temporada es habitual que en las segundas partes, los aficionados madridistas que ocupan el fondo sur, los ultras, coreen el nombre de su entrenador. Y ante el Málaga no faltaron a la cita. Hasta en cinco ocasiones cantaron "Jose Mourinho", con la sonora reprobación de los seguidores 'boquerones', que fue acallada por el resto del estadio. Tal vez el Madrid no gane ningún título este año, pero el técnico luso sí que ha conquistado al Bernabéu.