Barcelona.- El técnico del Espanyol, Mauricio Pochettino, no se fía del Valladolid y pese al buen momento del equipo catalán en Liga ha pedido hoy prudencia y responsabilidad a sus futbolistas para que no se dejen llevar por la euforia y rematen la eliminatoria, encarrilada tras el 0-2 de la ida.
"Nuestra obligación es ser realistas y tener los pies en el suelo. Mañana tenemos un partido de Copa y no está finiquitado pese a la ventaja de dos goles. Hay que refrendarlo, el Valladolid nos lo va a poner muy complicado y saldremos al campo al 120 por ciento", ha explicado el técnico.
La posible poca asistencia de público a Cornellá-El Prat no preocupa a Pochettino: "Un martes, a las veintidós horas y con frío puede crear un ambiente que no sea el idóneo, aunque esto no nos tiene que importar. Nosotros debemos salir a dar el máximo y no podemos pensar que está todo hecho, sería un error pensar de esta forma".
Una de las principales tareas del técnico estos días es controlar la euforia que vive el Espanyol tras consolidarse en la parte alta de la clasificación en la Liga. "A todo el mundo le hace ilusión estar arriba, pero como responsable del equipo debo mantener el nivel de intensidad y concentración porque las notas se dan al final de Liga", ha dicho.
Mauricio Pochettino ha insistido en que la prudencia debe ser la máxima de la plantilla blanquiazul: "Mi labor es la de mantener la concentración. No hemos logrado absolutamente nada, aunque estamos en un buen camino".
El entrenador blanquiazul no se ha mostrado excesivamente inquieto por los bajones de juego del Espanyol, como se vio ante el Málaga. "Ningún equipo de la Liga mantiene el mismo nivel los 90 minutos de partido. La exigencia de la Liga es alta y a todos nos apetece estar arriba", ha comentado.
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