Una patada fallida y lesión de Iker Casillas para tres meses. Se juntó toda la mala suerte en una jugada y el Real Madrid tuvo que acudir al mercado de invierno con prisa y ansiedad. Tener sólamente a Adán como alternativa para la portería blanca no era lo más seguro, por lo que los blancos llamaron a Diego López, ex futbolista merengue, ahora suplente en el Sevilla, antes en el Villarreal, para que volviese a la que fue su casa desde que era un niño. Diego López, lógicamente, encantado.
En el próximo mes el Real Madrid tendrá que jugar tres veces contra el Barcelona (semifinal de la Copa del Rey a ida y vuelta y partido de la Liga BBVA) y dos contra el Manchester United (octavos de final de la Champions League). Duelos decisivos que decidirán una temporada. Y duelos, también, en los que Casillas no podrá ser de la partida, por lo que Diego López y Adán pelearán por la titularidad.
Sin embargo, en el Barcelona hay un futbolista que no debe estar tan contento por la lesión del portero blanco, o eso es lo que dicen los datos. No es otro que Leo Messi, cuyo portero favorito, a quien más goles ha marcado en toda su carrera deportiva, es Iker Casillas. Hasta en 17 ocasiones ha batido al guardameta español desde que lo hiciese por primera vez en el año 2007. Fue un hattrick.
La racha de Messi contra Casillas se ha acrecentado en los últimos años. En la temporada 12/13 ya le había hecho 4 goles, por los 3 que hizo la campaña anterior. En la 10-11, otros 4 tantos. Una trayectoria que podría haber seguido en aumento si Casillas hubiese estado disponible.
Este hecho provoca que Messi pueda estrenar a otro portero blanco, algo que todavía no ha probado. Adán y Diego López, los próximos objetivos del crack argentino.
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