Cristiano Ronaldo no quiere volver a perderse el partido más importante de la temporada, como ya le ocurriera en la final de la Copa del Rey ante el Barcelona y por eso está dispuesto a forzar para jugar contra el Bayern, partido para el que es duda hasta última hora.
El portugués se lesionó en la ida de los cuartos de final contra el Borussia (2 de abril) y llegará al partido con 21 días de descanso y recuperación, completando el tiempo de baja estimado por los médicos del Real Madrid.
La sensaciones de los últimos días fueron positivas. Entrenó en solitarío el domingo, un día libre para el resto de compañeros, y realizó sprints y disparos a puerta. El lunes completó todo el entrenamiento con el grupo, le dijo a sus compañeros y a su entrenador que no siente molestias en el bíceps femoral y que el dolor en el tendón rotuliano ha disminuido.
El martes los médicos volvieron a examinar su bíceps femoral y le avisaron de que si arriesga podría recaer, como le han repetido el miércoles por la mañana a horas del partido. A Cristiano no le han convencido y ha vuelto a asegurarle a a Ancelotti que quiere jugar. Su deseo es ayudar a sus compañeros para poder llegar a la final de la Champions, que este año se disputa en Lisboa, su 'casa'.
El portugués salió de la cantera del Sporting de Lisboa y llegó a debutar con el primer equipo. Quiere ser el mejor'embajador' del Madrid en Portugal. 'CR7' no piensa en el Mundial. Si fuerza y recae podría estar más de un mes de baja y llegaría muy justo a la cita mundialista.
Ancelotti tiene la última palabra y anunciará la alineación a sus jugadores poco más de dos horas antes del partido. ¿Forzar o no forzar?, esa es la cuestión.
Hemos bloqueado los comentarios de este contenido. Sólo se mostrarán los mensajes moderados hasta ahora, pero no se podrán redactar nuevos comentarios.
Consulta los casos en los que lainformacion.com restringirá la posibilidad de dejar comentarios