Real Sociedad 0-1 Atlético de Madrid: el 'tigre' Falcao se gana su ración de trigo en el último minuto

    • Radamel Falcao estuvo a punto de romper su racha de nueve partidos consecutivos anotando, pero un golazo de falta en el minuto 90 le valió para seguir alimentándose de su comida favorita: el gol.
    • El colombiano notó el cansancio de la semana de selecciones, lo que sumado al mal juego de su equipo hizo que apenas tuviera ocasiones claras.
Radamel Falcao pelea un balón en el partido ante la Real Sociedad
Radamel Falcao pelea un balón en el partido ante la Real Sociedad
Manu Albarrán

En el último minuto. Cuando parecía que podría quedarse sin "comer su ración de gol" neuev partidos después, Falcao aprovechó una falta en el borde del área de la Real para aumentar hasta diez el número de partidos en los que ha visto puerta (ocho con el Atlético de Madrid y dos con Colombia). Su primer tanto de falta desde que está en España le valió al Atlético para solventar el peor partido de lo que se lleva de temporada.

Los atléticos no fueron capaces de dominar el partido, pero tampoco de hacer daño a la contra. Falcao se aisló en la punta de ataque, rodeado de los defensas de la Real Sociedad, que le tenían atado en corto. Por detrás, ni Gabi, ni Mario Suárez ni Raúl García pudieron surtir de balones al 'Tigre', que conoció lo que es pasar hambre por primera vez en lo que va de liga.

Ante la falta de balones cerca del área, el colombiano se fue alejando de la zona de peligro para poder acariciar el cuero con sus botas. Esos acercamientos al medio del campo acabaron por desesperar a Falcao, que en dos ocasiones intentó hacer la guerra por cuenta; aunque ambas veces se embolicó y algún rival le acabó quitando la pelota.

Además, y pese a su inagotable mentalidad luchadora, Radamel acabó pro acusar el partido que disputó con Colombia que jugó la semana pasada y los dos viajes trasatlánticos que tuvo que hacer para poder jugarlo. Al final del encuentro, aunque su cabeza le pedía correr, sus piernas encendieron la luz de la reserva de energías.

En el último suspiro, cogió aire y, apartando al capitán Gabi, eligió tirar él una falta al borde del área. Sin fuerzas pero sí con la confianza que dan los goles y las victorias, colocó el balón pegado al palo izquierdo de un Zubikarai que se estiró en balde. Ya son diez partidos seguidos marcando, pero el 'Tigre' no se sacia nunca. Próximo objetivo: el debut el jueve en Europa League ante el Académica de coimbra portugués.

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