La Coruña.- Iván Sánchez 'Riki', delantero del Deportivo, ve "segura" su reaparición en los terrenos de juego antes de final de año tras una apendicitis que le obligó a pasar por quirófano el pasado viernes.
"Seguro que antes de que acabe el año puedo jugar", comentó el madrileño, que ya ha podido ejercitarse en la bicicleta estática y caminar en el césped de la ciudad deportiva pese a la reciente intervención.
"Fue una operación bastante limpia y en tres semanas podré jugar. Eso espero", indicó el atacante del Deportivo a los periodistas antes de retirarse al vestuario.
Riki comenzó a notar molestias el pasado jueves y de madrugada tuvo que acudir de urgencia al hospital, donde fue operado a última hora de la tarde del viernes.
"Me empezó a doler la tripa el jueves por la tarde, estuve aguantando un poco y a las cuatro de la madrugada tuve que ir al hospital porque no aguantaba más. Pensé que me iban a pinchar y me iban a mandar a casa, pero resulta que me quedé ingresado", relató.
"A raíz de eso me hicieron pruebas y se vio que era un principio de apendicitis y que había que operar", agregó el jugador blanquiazul, formado en el Real Madrid.
Riki, que recibió el alta hospitalaria el domingo, lamentó que la enfermedad haya frenado su progresión jornadas después de haber recuperado la titularidad.
"Me encontraba bien, otra vez jugando, y este contratiempo me hace parar, pero soy fuerte, nunca me he rendido y ahora con treinta años, menos", declaró.
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