"No sé si podremos o no, pero vamos a pedir hora, árbitro y nos vamos a presentar si hay hora y árbitro. Vamos a solicitar la hora a la que tenemos que jugar, el árbitro que nos designan y vamos a agotar todas las posibilidades para poder jugar", declaró a su salida de la Junta de Primera División en la sede de la LFP.
En esa reunión, en el que estuvieron representados los 20 clubes de la máxima categoría, se mantuvo la decisión de suspender la próxima jornada de Liga al no haber avances significativos en sus solicitudes al Gobierno, una postura a la que se oponen siete clubes, entre ellos el Villarreal y el propio Fernando Roig. "En mi cabeza no entra que con un paro patronal se solucione el problema", advirtió el presidente del club amarillo, que explicó: "Hay que agotar el diálogo y seguir por el camino de la reclamación, pero estoy totalmente en desacuerdo (con que se suspenda la próxima jornada). Me parece una aberración".
"El Villarreal lo que dice es que está totalmente de acuerdo en que el partido en abierto no es bueno para el fútbol. Y yo creo que se debe hacer un estudio profundo de esa situación, igual que del reparto del dinero y de las apuestas. Y, partiendo de todo eso, que está totalmente de acuerdo en que hay que cambiar eso, en los momentos que vivimos no es bueno para el fútbol llegar a una situación de paro patronal", valoró.
"Estoy totalmente en desacuerdo de que se adopte esta posición de fuerza", continuó Roig, que apuntó: "La administración debe de entender que lo que es bueno para el fútbol es tener diálogo y hay que hacerles entender que con el diálogo se puede llegar a la solución".
"Hay que oír al fútbol, pero no es el camino (un paro patronal). No entiendo el proceso que es hacer un parón, sobre todo lo que nos va a conllevar, que la penúltima jornada sería el 22 de mayo y pasaríamos a jugar una última jornada 21 días después", recalcó el presidente, que avanzó que eso sería un "auténtico desastre" y que consideró que cambiar todo el calendario es una "monstruosidad".
Roig, que se declaró "enemigo de hablar de la huelga", no es optimista acerca de que se juegue la jornada. "Siempre va a pasar en el fútbol como siempre, que se llevará el límite al final y no sé qué pasará", añadió, al tiempo que lamentó: "(En la reunión de esta tarde) solamente han venido seis presidentes. Sólo nos estábamos jugando una valoración importante".
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