Rossi, Lorenzo y Márquez intentan rebajar la tensión

  • Valentino Rossi, su compañero de Yamaha Jorge Lorenzo y Marc Márquez se mostraron este jueves dispuestos a rebajar la tensión que rodea el desenlace del Mundial de motociclismo en la MotoGP, que termina el domingo en Valencia (España), con la disputa del título entre los dos primeros.

Esta última carrera del curso llega en un clima enrarecido en la competición después del incidente entre Rossi y Márquez en el Gran Premio de Malasia. El italiano desestabilizó al catalán entonces y saldrá, como sanción, último el domingo en la carrera de Cheste, a la que llega apenas con 7 puntos de ventaja sobre Lorenzo.

"Salir último en el Gran Premio de Valencia pone las cosas muy difíciles, pero voy a entregarme al máximo y ver lo que pasa", declaró Rossi en una conferencia de prensa de Yamaha.

"Evidentemente, no es cómodo pensar en una estrategia y los riesgos son más importantes en esta posición, pero espero que todo transcurra en condiciones normales", añadió, en el mismo día en que conoció que el Tribunal Arbitral del Deporte (TAS) desestimó su petición de suspensión del castigo.

Rossi saldrá por lo tanto detrás de una veintena de pilotos en el circuito de Cheste.

"Únicamente puedo esperar un comportamiento normal de los pilotos que vayan delante. Tendré que ser más rápido que ellos", añadió el italiano, que aspira a un décimo título mundial, teniendo en cuenta todas las categorías.

Desde Italia se venía acusando a Márquez, sin opciones desde septiembre de revalidar el título mundial, de maniobrar en un 'pacto de españoles' con Lorenzo, en perjuicio del 'Dottore' Rossi.

El incidente de Malasia no hizo sino aumentar varios grados la tensión.

Jorge Lorenzo había hablado unos minutos antes que Rossi, en la misma silla, también con un tono conciliador. Dijo que la tensión vivida es "un espectáculo poco recomendable, especialmente para los jóvenes seguidores de la MotoGP".

"Voy a tratar de hacer una de las mejores carreras de mi vida", apuntó. No quiso referirse directamente a los que pasó en Sepang.

Marc Márquez (Honda), por su parte, afirmó que quería pasar la página de la polémica de Malasia y dijo que el domingo en Valencia intentará "hacerlo lo mejor posible, como siempre".

"Me apoyan mi familia y mis amigos", declaró el catalán, que dijo haber vivido "una de las peores semanas" de su vida al verse en el medio de la polémica.

"El próximo año estaré de nuevo en la carrera por el título", prometió.

syd/dr

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