Madrid, 30 ene.- Javier Ruiz de Larrinaga, tetracampeón de España, partirá este viernes hacia Hoogerheide (Holanda), como principal baza del equipo español que participará en los Campeonatos del Mundo de ciclocross, en la prueba que se disputará el domingo a las 15 horas.
El ciclista alavés, quien terminó con buenas sensaciones en la Copa del Mundo de Nommay, donde fue vigesimoséptimo, advierte de las condiciones en las que se puede encontrar el circuito de la localidad holandesa que vuelve a acoger el Mundial de la especialidad cinco años después.
"En Hoogerheide hemos corrido de todas las maneras posibles y cambia mucho de una condición a otra: si está seco, es rapidísimo, incluso excesivo, y si hay barro, es el típico circuito 'pesado', de los que cuesta mantenerse encima de la bici", señaló Ruiz de Larrinaga.
Circuito aparte, y cualesquiera que sean las condiciones, Larrinaga advierte que sin mantiene "la forma física de las últimas carreras", cree que tendrá la oportunidad de hacer su mejor Mundial.
A pesar de que sus actuaciones en Mundiales anteriores siempre han terminado por debajo de su nivel habitual, con los puestos 28 y 29, en esta ocasión las previsiones son más optimistas.
"Este es el primer año en que he podido planificar mi temporada bien y no he tenido contratiempos en forma de lesiones", señaló.
La buena forma le permite a Ruiz de Larrinaga llegar fuerte a Hoogerheide: "Es muy difícil saber si llego igual, peor o mejor que a Segorbe porque la mentalidad es diferente: no es lo mismo disputar que salir a remontar posiciones desde la primera curva. Pero estoy como quería: se trataba de hacer el último mes de temporada a tope y lo estamos consiguiendo".
La clave estratégica de Larrinaga para este Mundial será "mi problema: la salida. "Si soy capaz de hacer un arranque como en la Copa del Mundo Namur, cuando mantuve bien las posiciones, mi carrera será buena, pues soy capaz de mantener un ritmo regular y no venirme nunca abajo", aseguró.
El Mundial de Hoogerheide pondrá a un total de nueve españoles en liza en todas sus categorías, y con un pronóstico, al menos en la categoría reina, más abierto que nunca.
El recorrido será similar al de hace un año en la Copa del Mundo, salvo algunos pequeños cambios, con una longitud de 3.443 metros, de los que un 73 por ciento serán de praderas, un 14 de bosque y un 13 de asfalto.
El resto de los "ciclocrossmen" que componen la expedición española son los élites Aitor Hernández, Aida Nuño y Rocío Martín, el sub23 Jonathan Lastra y los juniors Diego Pablo Sevilla, Raúl Fernández y Gotzón Martín, una vez que Alex Aranburu ha causado baja por lesión, al fracturarse la muñeca en Ispaster. Felipe Orts será su sustituto.
La prueba reina del Mundial tendrá lugar el domingo 2, a las 15,00. En ella, los holandeses intentarán desquitarse del regusto amargo de 2009, cuando su gran esperanza, Lars Boom, pasaba totalmente desapercibido, sin poder repetir el título logrado un año antes en Treviso.
Terminar entre los veinte primeros sería "un gran resultado" para Larrinaga y Hernández, aunque quizá su posición natural sea entre el veinte y el treinta. Para el alavés, éste será su séptimo Mundial, llega en el mejor momento de forma y de moral de la temporada.
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