Redacción deportes, 11 mar.- Vincenzo Nibali dio un paso decisivo hacia la victoria final en la Tirreno-Adriático con un ataque en la sexta y penúltima etapa que terminó con victoria del eslovaco Peter Sagan y la camiseta de líder para el italiano con 34 segundos de ventaja sobre el británico Chris Froome.
Nibali es el ganador virtual de la carrera a la espera de la contrarreloj final, cuyo recorrido, de 9,2 kilómetros, deja escaso margen de esperanza a Froome, segundo con tres segundos de ventaja sobre Joaquim Rodríguez y seis sobre Alberto Contador.
La etapa, disputada bajo una lluvia intermitente en un circuito con salida y meta en Porto Sant'Elpidio hasta completar 209 kilómetros, presentaba, a 17 del final, una subida de 6,3 km con un suave desnivel medio del 2,9 por ciento pero con una rampa brutal del 27 que, sin embargo, no decidió nada.
A 14 km. de la llegada, en plena rampa de ascenso, concluyó la aventura de la escapada del día, en la que habían formado, entre otros, Fabian Cancellara, Damiano Cunego y los españoles Beñat Intxausti, Egoi Martínez y Angel Vicioso.
El perfil de los 12 últimos kilómetros, plagados de repechos y descensos sobre un piso mojado por la lluvias, estimuló la ambición del tercero de la general, Vincenzo Nibali, que atacó cuesta abajo y se llevó consigo primero a Peter Sagan y luego a Joaquim Rodríguez.
El líder Chris Froome, que en la salida contaba con 20 segundos de margen sobre Alberto Contador y Nibali en la general, había perdido terreno aunque pudo engancharse a un tercer grupo que le llevó hasta la meta.
Nibali, Sagan y Rodríguez colaboraron en cabeza y abrieron un hueco de medio minuto a 5 kilómetros de meta, una distancia que fue aumentando sobre el grupo perseguidor, en el que viajaban Alberto Contador y Samuel Sánchez.
En un esprint de tres corredores, Peter Sagan, un especialista, no tuvo que emplearse a fondo. Cruzó la meta con un tiempo de 5h45:17, dos segundos por delante de Nibali y Rodríguez, y recibieron, respectivamente, los 10, 6 y 4 segundos de bonificación.
El grupo de Contador llegó 44 segundos después, y el de Froome a ocho segundos de éste.
En la primera mitad de la etapa abandonó el luxemburgués Andy Schleck, que sólo ha podido terminar una carrera en los últimos doce meses debido a las lesiones. El corredor del RadioShack sólo ha podido acabar el Gran Premio de Camaiore, el mes pasado, desde la clásica Lieja-Bastoña-Lieja del año pasado.
Mañana se disputará la séptima y última etapa, una contrarreloj individual de 9,2 kilómetros.
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