Simeone-Molina, duelo táctico entre dos ídolos del 'doblete'

  • El argentino Diego Pablo Simeone y José Francisco Molina, entrenadores de Atlético de Madrid y Villarreal, respectivamente, se reencontrarán el próximo domingo en el Vicente Calderón, ahora en el banquillo, dieciséis años después de que ambos conquistaran el histórico 'doblete' con el equipo rojiblanco.

Madrid, 12 ene.- El argentino Diego Pablo Simeone y José Francisco Molina, entrenadores de Atlético de Madrid y Villarreal, respectivamente, se reencontrarán el próximo domingo en el Vicente Calderón, ahora en el banquillo, dieciséis años después de que ambos conquistaran el histórico 'doblete' con el equipo rojiblanco.

Los dos, el primero como centrocampista y el segundo como portero, eran indiscutibles en un once inolvidable en la memoria de los aficionados del Atlético, completado con Delfi Geli, Santi Denia, Roberto Solozábal, Toni Muñoz, José Luis Pérez Caminero, Juan Vizcaíno, Milinko Pantic, Francisco Narváez, 'Kiko', y Lubo Penev.

Ese equipo, dirigido por el serbio Radomir Antic, ganó Liga y Copa del Rey en la temporada 1995-96, la última vez que el conjunto madrileño levantó títulos nacionales, con Molina como un guardameta muy fiable y con la intensidad de Simeone como uno de los motores del centro del campo, donde firmó doce goles en Liga, el último en el 2-0 que coronó como campeón liguero al Atlético ante el Albacete.

El centrocampista argentino jugó cinco campañas en las filas del equipo rojiblanco, divididas en dos etapas (de 1994 a 1997 y de 2003 a 2005). El mismo tiempo pasó en el club el guardameta, que defendió la portería del Atlético desde 1995 hasta el 2000. Los dos, más de una década después, siguen siendo admirados por la afición atlética.

Ahora, dieciséis años después del 'doblete', ambos cruzarán sus caminos en los banquillos. De la misma generación, con 41 años, y por primera vez como técnicos en un encuentro en el estadio Vicente Calderón, uno en el local y otro en el visitante, para ambos se espera un gran recibimiento en el choque del próximo domingo.

"Tengo un gran afecto y cariño por Molina. Será un lindo encuentro. Estoy seguro de que la gente lo recibirá de la manera que se lo merece por todo lo que le ha dado a nuestro Atlético", destacó el miércoles Simeone, en su comparecencia semanal previa al partido que enfrentará a ambos conjuntos en el Manzanares.

Simeone y Molina se estrenan este curso como entrenadores de la Primera División española. Han sido la apuesta de sus clubes, dos aspirantes a las plazas de Liga de Campeones, para reflotar dos equipos deprimidos. A finales del pasado mes de diciembre, Simeone sustituyó a Gregorio Manzano y Molina a Juan Carlos Garrido tras las eliminaciones en Copa del Rey ante Albacete y Mirandés, respectivamente, de Segunda División B.

Sus equipos necesitan una reacción urgente. El Atlético no ha pasado del octavo puesto en esta Liga, es undécimo en la clasificación y sólo ha sumado 20 de los 51 puntos disputados; el Villarreal está en plazas de descenso y resume las 17 primeras citas del campeonato con sólo tres victorias y siete empates.

Sus conjuntos ya apuntaron una mejoría la pasado jornada, en el debut de uno y otro con sus respectivos equipos: el Atlético dejó su portería a cero por primera vez en las últimas nueve jornadas con un 0-0 en Málaga; el Villarreal vencía al Valencia en El Madrigal hasta que un gol de Aritz Aduriz, en el minuto 87, marcó el 2-2 final.

Intensidad y presión. Son palabras repetidas en las comparecencias ante la prensa de los jugadores de ambos equipos desde la llegada de Simeone, en el caso del Atlético, y de Molina, en el del Villarreal, y su fórmula para sumar puntos, la primera medicina, más allá del juego, para aliviar la crisis de los dos clubes.

El técnico argentino cambiará su dibujo ante el Villarreal. Pasará del 4-1-4-1 de Málaga, con un perfil más defensivo, al 4-4-2 que alineará el próximo domingo, con Adrián López de vuelta a la titularidad como compañero de ataque del colombiano Radamel Falcao y con el turco Arda Turan y el brasileño Diego Ribas en las bandas.

Molina, que apuesta por la posesión y el buen trato de balón de su equipo, deberá suplir la baja del argentino Marco Ruben, que cumplirá encuentro de sanción, en el Vicente Calderón, donde podrá contar con Bruno Soriano, una vez que el Comité de Competición dejó sin efectos disciplinarios su quinta amarilla de esta temporada, recibida en el último choque contra el Valencia.

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