Sofía, 8 may.- El centrocampista brasileño Dakson da Silva, en las filas del Lokomotiv búlgaro, aseguró hoy entre lágrimas que el fútbol es su vida y que nunca se ha dopado, después de que se haya anunciado su suspensión temporal tras dar positivo por metilprednisolona en un control el pasado abril.
"Estoy en Bulgaria desde hace ya cinco años. Nunca he tomado estimulantes; yo, simplemente, juego con todas las fuerzas que tengo y hasta el momento nunca he caído en una situación como esta. El fútbol es mi vida y nunca me atrevería a doparme", aseguró da Silva en rueda de prensa, según recoge la agencia Focus Sport.
El médico de Lokomotiv, Konstantin Pavlov, asumió hoy toda la responsabilidad del caso y explicó que no llegó a declarar a las autoridades deportivas el uso de este medicamento, cuyo empleo no está prohibido si se notifica previamente.
Esta fuente informó hoy de que el futbolista no podrá jugar hasta que la comisión antidopaje del Comité Olímpico búlgaro decida si va a imponerle una sanción que, según especialistas consultados por Efe, podría ser hasta dos años fuera de los campos.
El control antidopaje se realizó a finales del pasado abril tras la semifinal de la Copa Búlgara entre el Lokomotiv y el Litex, que terminó con victoria de los locales por un gol a cero.
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