Málaga, 26 jul.- Moayad Shatat, hombre de confianza de Abdullah Al-Thani, propietario del Málaga, y ejecutivo de su Grupo empresarial Nas, llegó esta tarde a la ciudad de la Costa del Sol para resolver los asuntos pendientes en la gestión del club y ponerse al frente de él, por orden del jeque catarí.
Este ejecutivo, de nacionalidad jordana, aterrizó en el aeropuerto malagueño sobre las 17.00 horas y directamente se marchó al estadio de La Rosaleda, según han informado a Efe fuentes del Málaga, para empezar a trabajar en los diversos asuntos que tienen paralizados al club malagueño.
El Málaga debe hacer frente a las denuncias por retraso en los pagos presentadas por Villarreal y Osasuna ante la Liga de Fútbol Profesional (LFP).
El Villarreal reclama a Al-Thani el pago del IVA -cerca de 3 millones de euros- correspondiente al traspaso al club malagueño del internacional Santi Cazorla, tras abonar entonces 19 millones al contado, mientras que Osasuna exige cobrar uno de los plazos -un millón de euros- del traspaso, por 6 millones, del lateral Ignacio Monreal.
Además, la entidad malaguista debe hacer frente a las cantidades que tiene pendientes de pagar a los futbolistas correspondientes a la pasada temporada, para lo que el plazo cumple el próximo martes.
También mañana cumple el segundo pagaré por importe de unos 3,5 millones de euros que el jeque catarí debe pagar al expresidente del Málaga Fernando Sanz, por la adquisición del club hace dos años.
Asimismo, Shatat, que a partir de ahora se hace cargo de la gestión del club por designación expresa de Al-Thani, deberá solucionar la posible salida de Cazorla, que tiene una oferta del Arsenal inglés, el posible traspaso del medio Antonio Galdeano 'Apoño' al Real Zaragoza y el hipotético traspaso del centrocampista José Recio al club aragonés.
El técnico malaguista, el chileno Manuel Pellegrini, no cuenta con estos dos últimos jugadores.
Por otra parte, la plantilla del Málaga continúa con los entrenamientos en Venezuela, adonde llegó el pasado lunes para una gira de ocho días, con dobles sesiones de trabajo cada jornada, aunque esta tarde -por la mañana en el país venezolano- los veintidós jugadores desplazados tuvieron descanso.
El equipo malaguista jugará mañana en Barinas, ciudad en la que actualmente está concentrado, el primero de los dos partidos amistosos que disputará en Venezuela, que le enfrentará al Zamora FC, de la primera división de ese país.
El domingo, ya en la capital venezolana, jugará el segundo partido de preparación frente al Caracas.
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