Óscar Rodríguez
Marcos no puede pedir nada más a la vida. Se ha casado con su novia Neus, con sus amigos como testigos y en la ceremonia ha sonado la música que más le gusta: la de la Champions League, como gran aficionado al fútbol que es.
El novio se emocionó con la composición originaria de Händel y modificada para convertirlo en el himno del fútbol europeo y se levantó al final de la interpretación para aplaudir... y para hacer una reverencia al coro.
Vamos, que se comportó en su boda como si estuviera en el Camp Nou y cambiaran a Messi.
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