Unda vuelve a sus ovejas y sus quesos, algo "menos duro que los Juegos"

Bilbao, 14 ago.- La luchadora alavesa Madier Unda, bronce en los Juegos de Londres, ha vuelto hoy a su caserío, donde, junto a su familia, se encarga de cuidar ovejas y elaborar quesos con su leche, una actividad "menos dura que los Juegos".

Tras aterrizar ayer de vuelta de la capital británica, Unda ha hablado hoy a la prensa en su caserío de la pequeña localidad rural alavesa de Olaeta, a los pies del monte Gorbea, sobre su regreso a la vida cotidiana, en la que, a sus 35 años, buscará ser madre.

La medallista en lucha libre en la categoría de menos de 72 kilos, ha explicado que, tras los intensos días de competición vividos en Londres, intenta recuperar la normalidad con la vuelta al cuidado de las ovejas de raza "latxa" (autóctona del País Vasco).

La familia de Unda, sus padres y cuatro hermanos, obtiene de su rebaño de "latxas" la leche con la que elaboran, de forma artesanal, sus propios quesos de la denominación de origen "Idiazabal", muy apreciados en el mercado vasco.

Unda ha declarado que, tras los Juegos de Londres, tiene "claro" que su prioridad más inmediata, aparte de descansar y buscar la tranquilidad durante cinco días en la playa, será la de ser madre.

Sobre su retorno al hogar ha manifestado que "tenía ganas ya de salir de la burbuja que son unos Juegos". "Aquello (por Londres) es una burbuja donde todo se magnifica y, para mi, la realidad es esto: mi casa, mi cama, mi familia y mi entorno".

Su vida rural "no tiene más que ventajas", aunque reconoce que su participación en los Juegos le ha reportado popularidad.

Cuestionada sobre si es más dura la competición olímpica o su vida diaria en el campo, Unda no tiene dudas en señalar que lo más duro es lo deportivo. "La preparación para unos Juegos es algo que requiere mucha concentración y muchos años de sinsabores".

"Eso es algo que no se ve ahora -ha agregado-, pero he pasado por muchos años en los que no levantaba cabeza; que aparecía una lesión, luego otra y, sobre todo, son momentos en los que nadie se acuerda de ti y en los que pocas personas quieren ayudarte".

Sin embargo, para la campeona alavesa, lo más positivo que ha sacado de su carrera deportiva es "precisamente, esa gente" que le "animó a no tirar la toalla en los momentos duros". "Gracias a ellos, estoy aquí", señaló.

Unda ha revelado que los Juegos de Londres no han tenido "nada que ver" con la de Pekín, donde fue su primera participación. "La verdad es que a Londres no he ido con la mismas expectativas que fui a Pekín. Aquellos fueron mis primeros Juegos, un sueño, sin embargo a Londres me plantee ir a competir y a dar el máximo para conseguir el triunfo".

Unda ha admitido que todavía no ha decidido la ubicación de la medalla ganada en Londres que ahora la tiene colgada en la cocina donde su madre, Maria Luisa, quien la ha acompañado ante la prensa, ha reconocido haber vivido con mucha emoción su triunfo en Londres.