Verdasco, el héroe de Mar del Plata

Santiago Aparicio

Sevilla, 30 nov.- Fernando Verdasco, en medio del cierre de un año gris, da la cara ante su tercera final de Copa Davis, que puede suponer la quinta "Ensaladera" para España, con el recuerdo aún vivo de Mar del Plata, cuando el madrileño logró el punto definitivo que supuso el cuarto trofeo para la "Armada".

Verdasco, componente de los equipos que lograron el éxito en el 2008 y en Barcelona 2009, hace frente a una cita que puede ilustrar un curso con más sombras que luces. Sin éxito alguno por primera vez desde el 2007.

El héroe de Mar del Plata, hace año y medio séptimo jugador del mundo que ahora ocupa el puesto veinticuatro, afronta su presencia en Sevilla beneficiado por la confianza del capitán, Albert Costa, fiel a un bloque que le ha proporcionado excelentes resultados.

Las dudas surgidas por el madrileño en el tramo final del 2011, incluidos los compromisos de Copa Davis ante Francia y Estados Unidos, donde como parte del dobles, con Feliciano López y Marcel Granollers, salió malparado, no han minado el ánimo del jugador, ansioso por disipar las incógnitas y por contribuir a un nuevo éxito del deporte español. De formar parte de la historia.

Fernando Verdasco, sin embargo, soporta el peso de la comparación de su mejor nivel, desvelado en el 2009, cuando prolongó la dinámica de juego desplegada en Mar del Plata y alcanzó la semifinal del Abierto de Australia, cuando disputó un encuentro memorable con Rafael Nadal, que le apartó de la final. Instalado entre los diez mejores del circuito, ganó New Haven y la Copa Davis en Barcelona, contra la República Checa.

Mantuvo el tipo en el 2010, cuando conquistó Barcelona y San José y fue finalista en Niza y en el Masters 1000 de Montecarlo. Fue el año en el que amplió a cinco una relación de éxitos que comenzó en Valencia en el 2004 y se amplió en el 2008 en Umag.

Verdasco se puso de moda. Apostó por apuntalar su puesta a punto en Las Vegas y alternó su dedicación al tenis con 'cameos' publicitarios y en el mundo del espectáculo, como el cine.

El 2011 no ha sido un buen año para el zurdo madrileño de 28 años, seguidor acérrimo del Real Madrid a punto de cerrar la temporada en blanco. Sin éxitos. Con fallidos intentos en los torneos de Gstaad, Estoril y San José, donde perdió en la final.

Consolidado en el equipo de Copa Davis, con el que ha participado en todas las eliminatorias de la temporada, desde Bélgica en octavos de final, donde participó también en los individuales, hasta Estados Unidos y Francia, es un fijo para el dobles de Albert Costa junto a Feliciano López, con el que espera compartir los éxitos y las sensaciones de hace tres años, en Mar del Plata.