Verdasco, Ferrero, Maria José Martínez y Andújar, la cara española en el primer día de Roland Garros

Fernando Verdasco, Juan Carlos Ferrero, Pablo Andújar y María José Martínez abrieron el torneo de Roland Garros con victoria en la primera jornada, en la que Daniel Muñoz de la Nava, Albert Montañés y Lara Arrubarrena-Vecino se despidieron prematuramente.

Verdasco superó con facilidad al belga Steve Darcis, por 6-3, 6-2 y 7-6 (4) en dos horas y 13 minutos de lucha para sumar la segunda victoria ante Darcis este año (Barcelona). El madrileño, que el año pasado cayó en tercera ante el croata Ivan Ljubicic, se mostró seguro con su derecha, como le sucedió en Madrid ante Rafael Nadal, y con ese golpe firmó su primera victoria este año en París.

Para Juan Carlos Ferrero, superar al francés Jonathan Dasnieres de Veigy, invitado especial, por 6-1, 6-4 y 6-3, fue una cuestión de experiencia, factor que el campeón del 2003 sabe exprimir cuando la ocasión lo requiere.

Limpio de lesiones ahora, tras sufrir en el pasado en su muñeca y rodilla, pero jugando nada más este año 12 partidos hasta París, Ferrero tiró de su habilidad histórica para salvar a su favor su primer escollo y citarse en segunda ronda contra el croata Marin Cilic, finalista en Munich, que derrotó al español Daniel Muñoz de la Nava, que venía de la previa, por 6-4, 6-4 y 7-5.

No obstante, Ferrero dejó claro que a final de año, por octubre, revisará su ránking, y sobre todo su motivación, y decidirá si continúa la temporada que viene. "Necesito más partidos para recuperar el ritmo, pero amo al tenis, y esa es mi motivación", dijo, "pero si tengo problemas para entrar en los Masters Series y debo jugar las previas, no me veo".

"Mi intención es jugar hasta final de año y luego, a partir de octubre, ver si estoy entre el 25 o el 30 y entonces puede que juegue otro año, pero si estoy el ochenta o noventa, definitivamente no, porque los kilómetros se van notando", añadió.

Pablo Andujar si que tuvo que hacer una gran carrera para imponerse al veterano rumano Victor Hanescu, por 6-1, 2-6, 1-6, 6-3 y 6-1 y lograr la segunda ronda. El campeón de Casablanca tendrá un duro rival en el siguiente duelo, el suizo Stanislas Wawrinka (14) que derrotó al italiano Flavio Cipolla, por 6-3, 6-3, 4-6, 3-6 y 6-2.

También María José Martínez tuvo que sudar a fondo para deshacerse de la checa Eva Birnerova por 4-6, 6-4 y 8-6, jugando todo el partido con un aparatoso vendaje en el muslo derecho, y teniendo muchas dificultades para cerrar un partido que se le puso muy cuesta arriba.

María José se enfrentará ahora contra la checa Lucie Safarova, que derrotó a la bielorrusa Anastasiya Yakimova, por 6-2 y 6-0.

Falta de experiencia en torneos del Grand Slam, y en su primera comparecencia en una pista tan importante como la Suzanne Lenglen, la tolosarra Lara Arruabarrena-Vecino, la única española que ha ganado este año un torneo WTA, en Bogotá, se vio superada con contundencia por la serbia Ana Ivanovic, campeona en 2008 por 6-1 y 6-1 en 59 minutos.

Albert Montañés no pudo liquidar al ex campeón del Abierto de EE.UU el argentino Juan Martín del Potro, semifinalista en París hace tres años, que a pesar de encontrarse lesionado en la rodilla izquierda se impuso al catalán por 6-2, 6-7 (5), 6-2 y 6-1 en tres horas y diez minutos.

Del Potro se había hecho daño en su rodilla después del torneo de Madrid, y en su sexta participación en París, saltó a la pista con unas cintas azules para proteger esa zona. Aguantó bien el primer el set, pero en el segundo comenzó mostrar signos de molestias. No corría a algunas dejadas y su cara reflejaba que no se encontraba cómodo.

El fantasma del abandono apareció en la pista Philippe Chatrier, cuando Montañés se hizo con el segundo parcial, a la quinta oportunidad, después de ir perdiendo en el desempate por 5-2 y ganar cinco puntos consecutivos en ese juego corto.

El jugador de Tandil tuvo que llamar al fisio en dos ocasiones y jugó a partir del segundo set con la rodilla fuertemente vendada. Fueron momentos de incertidumbre por parte del banquillo argentino, y de su entrenador Franco Davin, porque el ex campeón del Abierto de EE.UU. apenas podía moverse como acostumbra, y se jugaba cada punto al primer golpe, intentando minimizar esfuerzos.

Pero sorprendentemente, "Delpo" reaccionó en el tercer set, y Montañés no aprovechó su oportunidad. Le dejó mandar con su derecha y el de Tandil encontró la forma de manejar el partido con solvencia. EFE.