Según informa AUGC, el secretario provincial de AUGC, Juan Ostos, ha expuesto algunos de los problemas con los que se encuentran los guardias civiles durante dicha campaña, como es el hecho de "no disponer de lugares donde depositar el producto incautado en horario nocturno y en demarcaciones distintas a las suyas, lo cual origina situaciones problemáticas para los agentes".
Asimismo, ha incidido en "la necesidad de mejorar" la coordinación de las patrullas de Guardia Civil con los guardas de campo contratados por las diferentes explotaciones agrícolas, así como la coordinación entre los Puestos de Seguridad Ciudadana, los equipos ROCA y las patrullas del Seprona, en lo que respecta a este tipo de hechos delictivos.
Los representantes de ambas organizaciones han coincidido en "la necesidad" de que la Junta de Andalucía modifique la regulación del transporte del producto recolectado, porque "es claramente insuficiente", lo cual "favorece las actividades delictivas que se producen en este ámbito", según han señalado.
Ante ello, consideran que "al menos debería imponerse la existencia de guías conduce, para que los agentes puedan conocer en todo momento los vehículos autorizados para dicho transporte, así como los datos concretos de procedencia, volumen y destino del fruto recolectado".
Tanto AUGC, como Asaja, han mostrado su "preocupación por la falta de medios e insuficiencia de plantilla de la Guardia Civil en la provincia de Córdoba", a pesar de lo cual, "gracias a la profesionalidad e implicación de los guardias civiles, se obtienen unos buenos resultados que han permitido reducir este tipo de delitos e incrementar las aprehensiones de producto robado", han valorado.
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