El Popular se hunde en bolsa al sugerir Saracho una ampliación o una venta

El Ibex 35 cae un 0,87% y pierde los 10.500 puntos lastrado por Popular
El Ibex 35 cae un 0,87% y pierde los 10.500 puntos lastrado por Popular
EUROPA PRESS
M.T.
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Como si fueran palabras de Draghi, lo cierto es que la sinceridad de Emilio Saracho en su primera Junta General del Popular han provocado el miedo en los mercados y las ventas masivas. El banco ha acabado un día negro en mínimos históricos. Banco Popular ha liderado por mucho las pérdidas en el Ibex 35, y ha cerrado a 0,734 euros por acción, nuevo mínimo histórico por debajo de los 0,766 euros registrados el pasado 28 de noviembre. Ha caído más de un 9,61%. 

En España, las caídas se ven amplificadas por el correctivo sufrido por el sector financiero rompiéndose una racha de cuatro jornadas consecutivas al alza. El Ibex 35 cierra con una bajada 0,87% en 10.437 puntos.

El Ibex 35 ha liderado las caídas en el Viejo Continente, con una caída del 0,87% hasta los 10.437 puntos, alejándose de los máximos desde agosto en 2015 marcados la semana pasada.  El selectivo español se ha movido entre los 10.509 y los 10.436 puntos, mientras que los inversores han negociado 1.927 millones de euros. 

¿Por qué? Porque Saracho ha dicho que el banco necesita ampliar capital o pensar en fusiones, aunque defendió que merece la pena luchar por el banco. Fue oír estas palabras, más capital y ha cundido el pánico. Bajo la gestión de Ángel Ron, la entidad amplió capital a finales de 2012, por valor de 2.500 millones, y volvió a la carga a mediados de 2016, con otros 2.500 millones de ampliación.

Las ventas del banco tampoco parecen convencer a nadie dadas las pérdidas acumuladas: las acciones han caído más de un 66% en solo un año. Banco Popular se confirma como el 'farolillo rojo' del Ibex en 2017.La junta de accionistas aprueba las cuentas

La junta de accionistas de Banco Popular ha aprobado las cuentas del ejercicio 2016, que arrojaron unas pérdidas de 3.485 millones de euros, con al menos un respaldo del 93,59%.

El banco comunicó al mercado el pasado lunes la necesidad de corregir cuatro aspectos de sus cuentas del ejercicio 2016 después de llevar a cabo una auditoría interna.

En concreto, el auditor observa "insuficiencia" en determinadas provisiones constituidas respecto a riesgos que deben ser objeto de provisiones individualizadas, que afectarían a los resultados de 2016, y por ello, al patrimonio neto, por un importe de 123 millones de euros.

A ello se suma una "posible insuficiencia" de provisiones asociadas a créditos dudosos en los que la entidad se ha adjudicado la garantía vinculada a estos créditos que, estimada estadísticamente, ascendería, aproximadamente, a 160 millones de euros.

Asimismo, ha detectado la "posible obligación" de dar de baja alguna de las garantías asociadas a operaciones crediticias dudosas, siendo el saldo vivo neto de provisiones de las operaciones en las que se estima que pudiera darse esta situación de, aproximadamente, 145 millones de euros, lo que podría tener un impacto, aún no cuantificado, en las provisiones correspondientes a esas operaciones.

También apunta a determinadas financiaciones a clientes que pudieran haberse utilizado para la adquisición de acciones en la ampliación de capital de mayo de 2016, cuyo importe, si se verificara, debería ser deducido de acuerdo con la normativa vigente del capital regulatorio del banco, sin efecto alguno sobre el resultado ni el patrimonio neto contable.

La estimación estadística del importe de estas financiaciones es de 205 millones de euros, siendo el importe total objeto de este análisis de 426 millones de euros.

Fuentes del mercado explicaron que en la reexpresión de las cuentas del pasado ejercicio, que se incluirá en los estados financieros del primer semestre de este año, la entidad cargará 129 millones de euros contra resultados.

A ello habría que sumar 160 millones de euros contra patrimonio y los posibles 145 millones derivados de la revisión de las garantías asociadas a operaciones crediticias dudosas, que también se cargarían contra patrimonio.

Por otra parte, la junta de accionistas también ha ratificado el nombramiento de Carlos González Fernández como consejero independiente con un apoyo del 97,5% y de Antonio González-Adalid con el 83,4% de los votos.

También se ha acordado la reelección de PwC como auditor y la escisión parcial transfronteriza intracomunitaria de Banco Popular Portugal a favor de Banco Popular Español.

Además, se ha votado la aprobación del límite máximo de la remuneración variable hasta el 200% del componente fijo de la remtribución total de consejeros ejecutivos y miembros del colectivo identificado y la votación consultiva del informe anual sobre remuneraciones de los consejeros.

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