CEBRIÁN PREPARA SU SUCESIÓN Y DICE QUE PRISA ESTÁ YA “SANA Y SALVA”

El presidente ejecutivo de Prisa, Juan Luis Cebrián, comunicó hoy a la Junta de Accionistas de la compañía que va a proponer al nuevo Consejo de Administración una comisión encargada de elaborar en breve “un plan de sucesión” para él y para el consejero delegado, José Luis Sainz.
Cebrián dijo que ha aceptado la propuesta que le ha hecho “un número significativo de accionistas y consejeros” de prolongar su mandato hasta diciembre de 2020 por su compromiso “total y absoluto” con Prisa, con el objetivo principal de rebajar todo lo posible la deuda del grupo.
El director fundador de ‘El País’ garantizó que “si en algún momento estuviera en contradicción mi permanencia personal con los intereses de la compañía, serían estos, y solo estos, los que tendría en cuenta a la hora de tomar decisiones, por dolorosas que pudieran ser para mí”.
Sobre la situación de Prisa, comentó que “lo peor ha pasado” y “la empresa está sana y salva”, habiendo adelantado un año el cumplimiento de los compromisos de deuda adquiridos con los acreedores, de modo que hasta diciembre de 2018 no hay nuevas obligaciones con ellos.
También destacó los resultados de 2015, que por vez primera desde 2010 “arrojan un beneficio neto, por discreto que parezca, de 5,3 millones de euros, lo que marca un cambio constatable de tendencia en la evolución de nuestra economía y nos permite inaugurar una nueva etapa”.
“Pero no todo está resuelto aún. El nivel de endeudamiento del grupo continúa siendo elevado y lastra sus oportunidades de crecimiento y creación de valor, por lo que tenemos la inequívoca decisión de reducir nuestra deuda al máximo, procurando que no supere en ningún caso dos o tres veces el Ebitda atribuible”, agregó.
Para ello, explicó que “en el menor plazo posible” tomarán “las medidas adecuadas tanto respecto a la composición de nuestra cartera de activos como en lo que respecta a la reducción de costes en los servicios centrales y en las unidades operativas”.
A las entidades bancarias les pidió que “también pongan de su parte”, porque ”durante más de un lustro hemos estado trabajando fundamentalmente para ellas y ahora es tiempo de que lo hagamos para los accionistas, que han sufrido enormemente las consecuencias de esta crisis”.
Dijo que en la "nueva etapa", Prisa se centrará fundamentalmente en el mercado latinoamericano, habida cuenta de que un 63 por ciento de su ebitda procede de allí, “y hemos de seguir trabajando también en el aprovechamiento de la pequeña recuperación de nuestro país, que esperemos no naufrague”.
Respecto a la situación política y económica española, afirmó que “la irresponsabilidad manifiesta de muchos de nuestros líderes, a comenzar por la del presidente del Gobierno en funciones, dispuesto a alargar casi hasta el estertor la interinidad del poder, perjudica directamente a las expectativas de mejora económica y de los índices de empleo”.