Cuatro ucranianos fueron inculpados este martes en Rennes (oeste de Francia) y puestos en detención preventiva por organizar una red de migración clandestina hacia el Reino Unido, según la fiscalía de Rennes.
Esta red enviaba a los migrantes clandestinos a bordo de veleros alquilados en diferentes puertos franceses.
Las cuatro personas inculpadas, dos patrones y dos presuntos organizadores, fueron detenidos el viernes en la costa bretona "cuando organizaban el paso de siete ciudadanos de Ucrania", precisó en un comunicado el fiscal Nicolas Jacquet.
Los siete migrantes, también ucranianos, que se encontraban a bordo de un velero utilizado por los traficantes, fueron igualmente detenidos y liberados después con la obligación de abandonar el territorio francés.
"Esta red de inmigración utilizaba un modus operandi bastante poco habitual y relativamente costoso, puesto que un pasaje costaba entre 6.000 y 7.000 euros", explicó Julien Gentile, jefe de la Oficina Central para la Represión de la Inmigración Irregular.
Los ucranianos, que deseaban instalarse en el Reino Unido, utilizaban visas de turismo para viajar en coche desde Ucrania hasta Francia, donde se les esperaba para la travesía en velero.
En total, los investigadores estiman que los traficantes, que operaban como "patrones y escoltas" alquilaron más de una veintena de barcos.
La red, detectada desde mediados de 2014 por los agentes de aduanas, interrumpió su actividad en septiembre de 2015 después del control de un velero y la detención de los migrantes que se encontraban a bordo.
Pero en 2016 los traficantes de migrantes adquirieron un barco, amarrado en Saint-Quay-Portrieux. La puesta bajo vigilancia de este velero permitió a la policía detener el viernes a los traficantes.
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