FUNDACIÓN ONCE CELEBRA LA INCLUSIÓN DE LA DISCAPACIDAD EN LAS DIRECTRICES EUROPEAS PARA ELABORAR LOS INFORMES NO FINANCIEROS

La Comisión Europea acaba de aprobar una Comunicación con directrices, no obligatorias, para la elaboración de los informes no financieros como complemento de la Directiva 2014/95 sobre dicha materia. En esta comunicación se han incluido, a instancias de Fundación ONCE, varias menciones a la inclusión de las personas con discapacidad referidas a la diversidad de las plantillas, de los miembros de los órganos de gobierno empresariales, de los consumidores y en relación con el respeto a los derechos humanos.

Para Fernando Riaño, director de RSC y Relaciones Institucionales de Fundación ONCE, “lo conseguido por una entidad como la nuestra tiene una gran relevancia para los europeos con discapacidad. En el documento se menciona de forma explícita a la Convención de Derechos de las Personas con Discapacidad de Naciones Unidas, y supone un gran aval para impulsar la inclusión de las personas con discapacidad en la gestión empresarial, de una forma trasversal”.
“Mediante esta guía la discapacidad queda consolidada en relación con aspectos como la diversidad, la inclusión, el gobierno corporativo, los derechos de los consumidores y los derechos humanos”, enfatizó Riaño, que además es director de RSC, Comunicación y Relaciones Institucionales de ILUNION, el grupo de empresas sociales de la ONCE y su Fundación.
“Las directrices de esta guía facilitarán a las empresas la integración de la información ambiental, social y de gobierno material en los negocios, así como innovar y adaptar sus informes a las circunstancias particulares de cada uno”, reiteró.
Por su parte, para Carla Bonino, representante del Departamento de Programas Europeos de Fundación ONCE, y encargada de la interlocución con la Comisión Europea en este proceso, afirmó que “tras la incorporación de la discapacidad en la agenda europea de RSC en 2011, esta nueva guía es el hito más relevante en el ámbito de la UE para reforzar la discapacidad en la gestión empresarial, la RSC y la sostenibilidad, a través del reporte no financiero, entendido como mecanismo de mejora continua".
"Que la Comisión Europea, mediante la DG FISMA, haya contado con Fundación ONCE en este proceso, y haya incluido nuestras propuestas, es un motivo de gran satisfacción y un paso más en la transversalidad de la discapacidad en las agendas europeas”, agregó.
La adopción de estas directrices, no vinculantes, completa las normas de la UE ya existentes en materia de información no financiera. Así, las empresas incluidas en su ámbito de aplicación deben divulgar información relevante sobre políticas, riesgos e impactos en materia ambiental y social, de derechos humanos, lucha contra la corrupción y diversidad en los consejos de administración.
El 6 de diciembre de 2016 finalizó el plazo para la trasposición de la mencionada norma europea. Esta directiva, que da un paso más en la transparencia empresarial, obliga a los Estados Miembros de la Unión Europea a aprobar normas que obliguen a las empresas a divulgar su información no financiera, especialmente la relacionada con el impacto de la actividad de estas empresas en el medio ambiente y en los Derechos Humanos.
La directiva afecta a todas aquellas empresas que sean entidades de interés público y que a fecha de cierre del balance dispongan de un número medio superior a 500 empleados. Este es un ámbito de aplicación mínimo, que puede ser ampliado por las diferentes normas de trasposición que aprueben los Estados Miembros.

Mostrar comentarios