El expresidente de BBVA entre 1988 y 1990, José Ángel Sánchez Asiaín, falleció el pasado 31 de diciembre a los 87 años de edad en Madrid. Asiaín era presidente de honor de la Fundación BBVA, un cargo vitalicio.
El banquero fomentó la introducción de las tarjetas de crédito y de débito en la entidad. Fue, por tanto, uno de los mayores innovadores de la banca al intentar internacionalizar el sector e incentivando la concentración bancaria a nivel nacional. En 1987 lanzó una OPA, que finalmente no salió adelante, a Banesto. Ambas son medidas que se están llevando a cabo en la actualidad.
"José Angel Sánchez Asiaín fue ejemplar en todo lo que hizo. Su visión adelantada de la industria bancaria y su profunda creencia en valores son aportaciones esenciales a la cultura de BBVA, y contribuyeron de forma decisiva a la modernización de la banca en España", ha explicado el actual presidente del BBVA, Francisco González.
Sánchez Asiaín (Baracaldo, 1929) fue director del Servicio de Estudios del Banco de Bilbao (1954-1962), así como director general y presidente de su consejo de administración entre 1966 y 1988. Ha sido también consejero del Istituto per le Opere di Religione (IOR) del Vaticano (1989-2006), presidente del Centro de Investigación para la Inversión, Capital y Riqueza Nacional de España (1965-1969) y miembro del Consejo de Economía Nacional (1975-1980).
José Ángel Sánchez Asiaín era economista Licenciado por la Universidad de Deusto, doctor en Economía (Dinero y Finanzas) por la Universidad Central de Madrid y catedrático de Hacienda Pública y Derecho Fiscal de la Universidad de Valladolid y más tarde de la de Bilbao.
Era, además, Doctor Honoris Causa por la Universidad del País Vasco, por la Universidad Miguel Hernández de Elche y por la Universidad de Valladolid. Académico de la Real Academia de las Ciencias Morales y Políticas, de la Real Academia de la Historia, y de la Real Academia de Ciencias Económico-Financieras de Barcelona, académico de honor de la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando y presidente de la delegación española de la Academia Europea de Ciencias y Artes.
Sánchez Asiaín fue galardonado en 2013 con el Premio Nacional de Historia de España por su obra 'La Financiación de la Guerra Civil española'. También presidió la Fundación Cotec para la Innovación Tecnológica y la Fundación de Ayuda contra la Drogadicción, y era presidente de honor de la Fundación BBVA y del Colegio Libre de Eméritos.La primera tarjeta en España, en abril de 1971
Asiaín fue el padre de la primera tarjeta de crédito en España. Tuvo lugar en abril de 1971 en la capital vizcaína. En alianza con BankAmericard, perteneciente al Bank of America, esta primera tarjeta de crédito permitía el pago total a fin de mes o el aplazamiento con un porcentaje del 10% del saldo dispuesto, contando con un límite máximo de 25.000 pesetas.
El éxito de este revolucionario medio de pago, admitido también internacionalmente, se tradujo en que en 1971 el Banco de Bilbao emitió en España 742.000 tarjetas, frente a la previsión inicial de 215.000.
Además, en los tres primeros meses desde el lanzamiento, un total de 5.200 comercios, 700 de ellos en Vizcaya, ya aceptaban la tarjeta como medio de pago.
Tras el lanzamiento llegaron los años de implantación y extensión de la tarjeta bancaria, una etapa en la que resultó esencial VISA y su apertura a todas las entidades financieras. Asimismo, otras entidades que acabarían conformando BBVA, como el Banco de Vizcaya o el Banco Exterior de España se lanzaron a emitir sus propias tarjetas.
Posteriormente, en la década de los ochenta, nacieron nuevas tipologías de tarjetas y de modalidades de pago aún hoy en día en uso (primera Visa Oro de Europa, primera tarjeta de débito y de marca compartida, etc).
En los 90, por su parte, terminaron de emerger las distintas tipologías de productos y modalidades de pago actuales y, en 1999, nació BBVA, que tras la fusión de BBV y de Argentaria surgió con 6,1 millones de tarjetas en España y 3.329 cajeros automáticos.
Ya con la llegada del siglo XXI, BBVA la consigna para el banco sigue siendo innovar y, así, ha venido implantando nuevos servicios en sus tarjetas, como los relacionados con la telefonía móvil, el 'Contact Less', las tarjetas prepago o las complementarias.El orígen de las tarjeras... nació por no llevar suficiente dinero
Normalmente se suele hablar de la primera tarjeta como la que sacó Diners Club, según explica en su web el BBVA. Su fundador, Frank X. McNamara, fue a cenar a un restaurante donde curiosamente estaban hablando de un cliente que tenía problemas para hacer frente a sus pagos. Pero se dio cuenta de que había olvidado llevar suficiente dinero para pagar la cuenta.
Viendo que era un situación muy embarazosa, fundó la empresa Diners Club (el club de los que van a cenar). Al principio estaba pensada para ser usada como medio de pago en restaurantes, para ello el Sr. McNamara tuvo que convencer a muchos de ellos para que aceptaran su tarjeta.
Aunque la historia de McNamara es conocida, lo cierto es que la tarjeta de crédito no fue un invento suyo. Según un working paper de la Reserva Federal de Filadelfia, las tarjetas de crédito empezaron a emitirse desde la primera década del siglo XX. En principio se emitieron por compañías de gasolineras y grandes almacenes, pero no tuvieron mucho éxito dado que solo se podían utilizar en áreas geográficas y establecimientos concretos.La tarjeta de crédito como la conocemos hoy
Aunque hubo intentos de lanzar tarjetas de crédito universales, estas no aparecieron hasta más tarde. En el año 1958 se creó BankAmericard (hoy lo conocemos como VISA) e Interbank Card Association (que hoy es conocido como MasterCard). La tarjeta de crédito moderna había nacido.
American Express lanzó su primera tarjeta de crédito en 1958, al principio eran de papel, pero al año siguiente empezaron a emitirse de plástico. Estos sistemas se diferenciaban en que el pago era procesado de un modo centralizado, de forma que se podían crear sistemas abiertos.El futuro de la tarjeta de crédito
Actualmente las tarjetas de crédito y de débito se siguen renovando. Poco a poco se ha ido dejando de utilizar la banda magnética por los chips, mucho más seguros. Más si cabe es la estandarización de la tecnología RFID, que permite el pago contacless. Esta forma de pago permite realizar compras acercando la tarjeta al terminal TPV, sin introducirla en el lector ni pasarla por el lector de bandas magnéticas.
Asimismo, también surgen nuevos sistemas de pagos en Internet alternativos a la tarjeta de crédito, como por ejemplo Nimble.
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