La directora general de Telecomunicaciones de la Consejería de Medio Ambiente, María Victoria Seco, se ha reunido este martes con alcaldes del medio rural leonés para presentar la convocatoria que se ha publicado en el boletín Oficial de Castilla y León sobre las tecnologías satélite, la que ha asegurado que "en muchos casos es la única que va a llegar al medio rural", por lo que es fundamental garantizar que todos los ciudadanos "tengan acceso a los mismos servicios".
Para la directora de Telecomunicaciones, Castilla y León cuenta con una dificultad debido a "la orografía, la despoblación, la dispersión de la población y el envejecimiento de la comunidad", ya que en los pueblos pequeños y mal comunicados vive gente muy mayor, por lo que las más modernas tecnologías en materia de banda ancha que exigen hacer obra civil "cuentan con impedimentos para hacer llegar la fibra óptica a los pueblos".
A ello hay que sumar que "las compañías de telecomunicaciones se guían por cuestiones de rentabilidad, por lo que no están interesadas en acercar su servicio a los pueblos".
Según ha explicado María Victoria Seco, "mientras llegan las tecnologías más modernas, la tecnología de satélite es la más adecuada para el mundo rural", por lo que ha expresado su deseo de que "la convocatoria sea un éxito" y que todas las personas de Castilla y León en el medio rural que no tengan internet o lo tengan con velocidades muy bajas instalen en sus domicilios unos receptores satélites con la ayuda de la Junta de Castilla y León por un importe máximo de 400 euros, que implica el equipamiento y la instalación de un receptor en cada una de las viviendas, de modo que se podrán alcanzar unas velocidades de 22 megas "e incluso más".
De estas ayudas podrían beneficiarse las 6.000 personas sin acceso a internet existentes Castilla y León y se permitiría a aquellos ciudadanos que lo tienen con velocidades más bajas "que tengan acceso a un internet más digno y con más prestaciones".
En cuanto al precio del servicio del internet por satélite, Seco ha matizado que en un principio "lo que puede limitar a los ciudadanos a tener esa instalación es el propio equipamiento, pero a ello ayuda la Junta de Castilla y León, por lo que a partir de ahí cada ciudadano tiene que contratar su servicio con una compañía de telecomunicación, lo que conllevará un coste aproximado de 30 euros al mes".
COLABORACIÓN CON LA DIPUTACIÓN
Por su parte, el presidente de la Diputación de León, Juan Martínez Majo, ha afirmado que "internet y todo lo que ello significa en el mundo rural es importantísimo", por lo que ha explicado que la Diputación "va a estar dispuesta y con la mano tendida para colaborar con la Junta y con las teleoperadoras" para que los pueblos de la provincia tengan la cobertura necesaria, "no solo los vecinos sino también los pueblos en su conjunto".
Majo, quien ha reconocido que "sin la ayuda de la Junta de Castilla y León, la Diputación no tiene los medios para poder desarrollar esta línea de ayudas", ha anunciado que ambas instituciones realizarán un plan integral para que "la provincia pueda tener cobertura en todos los municipios rurales".
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