Según ha explicado la Junta en una nota, la delegada territorial de Fomento y Vivienda en Cádiz, Gemma Araujo, acompañada por la alcaldesa de la ciudad, Mamen Sánchez, ha visitado este miércoles las fincas objeto de intervención y ha destacado que este tipo de actuaciones "son muy importantes para la Administración andaluza, teniendo en cuenta que con ello se logra mantener el patrimonio residencial y responder a las demandas de los vecinos, en la mayoría de los casos encaminadas a la mejora de sus condiciones de vida".
Araujo ha destacado también el volumen de inversión que la Junta está destinando a las seis áreas declaradas en la provincia gaditana, "que se materializa en 12,8 millones de euros y 2.088 familias beneficiadas", ha añadido.
La delegada ha puesto de relieve la importancia de la rehabilitación que conforma uno de los pilares estratégicos del nuevo Plan Andaluz de Vivienda, "y en esa dirección viene trabajando el Gobierno andaluz para intentar resolver los problemas de deficiencias y deterioro en las viviendas", ha puntualizado.
Las obras en la calle Santa María de Gracia 5 y 7, con 12 viviendas, acaban de finalizar. El coste de las reparaciones, contratadas por la Agencia de Vivienda y Rehabilitación de Andalucía (AVRA), ha sido de 48.899 euros.
En Moral 1-12, con 20 viviendas públicas, se está reparando la fachada y la cerrajería. También se está actuando en los techos de las galerías y se sustituirá toda la cubierta, eliminando con ello los problemas de impermeabilización detectados. La cuantía de esta intervención asciende a 84.955 euros.
El ARRU declarada para el entorno de San Mateo y San Miguel contempla actuaciones en siete fincas con un total de 98 viviendas, destacando entre ellas las obras de mayor envergadura que se ejecutarán en Ramón de Cala 17 y Cazón 20, inmuebles que serán sometidos a una rehabilitación integral para la obtención de 21 viviendas. Según ha afirmado la delegada, la licitación de esta obra está prevista para principios de año con un presupuesto de 1,88 millones.
Se trata de una casa palacio con sus dependencias de labor y almacenes vinculados, que fue ocupada por vecinos en los siglos XIX y XX y transformada en edificación plurifamiliar a consecuencia de subdivisiones, ocupaciones de galerías y de espacios libres.
La Junta pretende con esta intervención recuperar un edificio con valores histórico-artísticos y hacerlo compatible con el uso residencial. También se prevé la instalación de un ascensor y la mejora de la accesibilidad. Durante la ejecución de las obras, con un plazo estimado de 15 meses, las familias residentes en el inmueble serán realojadas en otras viviendas temporalmente.
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